El pasado 15 de junio, Diario de Avisos informaba en exclusiva que la multinacional Uber comenzaba a operar en Canarias, una puesta en marcha que contaría con dos tipos de servicios en los municipios de Granadilla de Abona, Arona, Adeje y Guía de Isora.
El producto premium de la compañía, Uber Black, pone a disposición de los clientes vehículos de lujo. Sin embargo, la empresa ofrece también servicios de taxi con el objetivo de apostar por la colaboración entre ambos y así facilitar la convivencia.
El director general de la compañía en España y Portugal, Felipe Fernández Aramburu, anunciaba que la idea es que los profesionales del taxi se unan a Uber dándose de alta a través de la app a cambio de incentivos económicos.
Fernández explicó que quienes trabajen con la empresa hasta el 31 de agosto disfrutarán de una comisión de servicio del 0%, una bonificación de 450 euros adicionales si alcanzan 50 viajes semanales, y una retribución de 300 euros por cada recomendación, así como 150 euros extras si el recomendado realiza 25 trayectos. “Con estas bonificaciones pretendemos que se sumen el mayor número de taxistas posibles”, declaró el director.
Uber ha informado que durante su primera semana de funcionamiento en la Isla, 70 taxistas se han registrado en la aplicación y han comenzado a operar en las localidades tinerfeñas. “Un éxito de lanzamiento del servicio que esperamos que continúe obteniendo tan buenos datos y así alcanzar una colaboración pacífica entre el sector del taxi y la empresa”, aseguran desde Uber.
La compañía seguirá analizando cómo funciona el servicio y la aplicación entre los ciudadanos y visitantes, para así determinar si se puede ampliar a otros municipios de Tenerife.