Con estos simples consejos, podrás despedirte de la molesta arena de la playa que termina ensuciando tu coche o el suelo de tu casa. La playa, el sol y esa temible arena. Para muchos, la arena es una de las principales razones para preferir ir al monte o de senderismo en lugar de a la playa. Incluso aquellos que aman la costa reconocen que es casi imposible lidiar con la arena que termina en los zapatos, las toallas, los bolsos o el pelo. Afortunadamente, existen algunos trucos que pueden ayudarnos a evitar que ni un solo grano de arena llegue al coche o acabe en la cama o en el sofá de tu casa.
Ahora la pregunta es: ¿Cuál es la razón por la que la arena se ‘adhiere ‘pega’ tanto a la piel? De acuerdo con un artículo de Popular Science, la arena tiene afinidad por el agua, lo que la convierte en una sustancia hidrófila. Dado que las playas se encuentran cerca de la mayor fuente de agua del planeta, el mar, el aire suele ser bastante húmedo, lo que facilita la adherencia de la arena a nuestra piel.
El líquido elemento crea pequeños puentes entre los granos y exhibe una propiedad conocida como ‘tensión superficial‘. Esta propiedad se asemeja a una membrana elástica estirada, actuando como una banda elástica entre los granos.
Sin embargo, la arena no se humedece únicamente por estar en un ambiente con agua, sino también por el sudor de los bañistas. Además, el protector solar ayuda a que los granos de arena se adhieran todavía más. Por estas razones, es recomendable mantener tus objetos personales lo más secos posible, ya que de lo contrario la arena acabará pegándosele inevitablemente.
Cuando la arena se seca, tiende a desprenderse de las pequeñas grietas y pliegues del cuerpo, como los dedos, las axilas o las orejas, lo que puede resultar muy molesto, ya que generalmente esto ocurre cuando ya estamos de regreso en el coche hacia casa o justo cuando entramos por la puerta.
Estos son los cinco consejos que puedes poner en práctica para evitar que se te pegue la arena de la playa este verano y el último es el menos conocido:
Usar la ducha de la playa
El mejor método para reducir la cantidad de arena que se pega en el cuerpo es darse una ducha allí mismo antes de irte. Muchas playas en Tenerife tienen duchas públicas de uso libre. Lávate la arena de los pies y del cuerpo, sécate y ponte rápidamente los zapatos para no coger más arena.
Si estás en una cala o ‘charqueando’, aclararte con agua limpia también te resultará útil para eliminar cualquier contaminante que pueda haber. Además, así evitarás posibles irritaciones cutáneas. Aunque esto te resultará algo mas difícil ya que son pocos los charcos que cuentan con este tipo de servicios cerca.
¿Pero si el agua es la que hace que se pegue la arena por qué echarse más agua es efectivo? La explicación es que demasiada agua rompe el puente o banda elástica que se ha formado, haciendo que la arena se separe y se mueva libremente de nuevo.
Utiliza suavizante en tus toallas de playa
No existen las toallas impermeables. Pero se puede minimizar la cantidad de arena que se pega en las toallas utilizando suavizante. Este producto es hidrofóbico, o sea que repele agua. Y, de la misma forma, también evita la arena húmeda.
Es importante advertir que el suavizante funciona como medida preventiva. Luego, a la hora de lavarla tras haber disfrutado del sol y la playa, es mejor no utilizar este producto, ya que lo que hace es recubrir las prendas de una pequeña película. Así que tras la playa, usar solos detergente es ideal para eliminar la arena efectivamente.
Llevar calzado apto para la arena y el agua
El peor calzado que puedes llevar a la playa son las zapatillas. Es de sentido común. Al tener muchos pliegues y ser sensibles al agua y la humedad es más fácil que se llenan de arena.
En cambio, las típicas chanclas o sandalias y, sobre todo, unos buenos escarpines son perfectos para la playa. Permiten que la arena vuelva al suelo en vez de pegarse a los pies. Además, puedes lavarlos al mismo tiempo que te duchas para desprenderte de la arena que se ha pegado a la piel.
Evita los envases metálicos de bebidas
La nevera portátil es un clásico de los días de playa. Pero si sacas una lata de refresco, agua mineral o cerveza en un día caluroso, es posible que se llene de arena por la humedad que pudiera haber en el ambiente o por el viento que pueda hacer y que provoque que la arena se levante y acabe alrededor del envase de la bebida. Para evitarlo, puedes llevar vasos de plástico o recubrir los envases con una funda de espuma.
Échate talco para bebés para eliminar la humedad (y la arena también se irá)
El talco para bebés es una sustancia más hidrófila aún que la arena, por lo que absorberá esa humedad que hace que la arena se pegue a nuestra piel. La arena se secará y aflojará y será mucho más fácil desprenderse de ella. Cuando te la apliques notarás que, como si fuera por arte de magia, se seca casi por completo. Para retirarla se puede usar un cepillo, una toalla limpia, un paño e incluso un pincel.
Para aprovechar al máximo este truco. Puedes echarte talco en las manos antes de comerte tu bocadillo en la playa para evitar en lo posible acabar masticando arena crujiente.