Un verano más, la aparición de microalgas vuelve a mantener en vilo a buena parte de Canarias, en cuyo litoral este fenómeno intermitente, que no termina de desaparecer, ha aflorado con fuerza en distintos puntos. En los últimos días, con especial intensidad en Arico y Granadilla de Abona, que han tenido que adoptar medidas preventivas.
Ambos fueron los más afectados el martes, cuando aparecieron importantes extensiones de agua y espuma de color pardo y mal olor, que alertaron a bañistas y a las propias autoridades locales.
En el caso segundo caso, la zona se encontraba mucho más clara, si bien se mantenían focos visibles en el espacio situado entre La Jaquita y Montaña Pelada.
En el caso de Arico, un bando de Alcaldía recomendó a los bañistas no hacer uso del mar, mientras que, en el de Granadilla, la recomendación era aún más garantista, prohibiéndolo directamente.
Ambas decisiones se mantenían ayer a la espera de conocer los resultados de los análisis efectuados.
En diferentes puntos de Canarias
En las últimas semanas, fenómenos como este se han podido apreciar en distintos puntos del litoral de Tenerife y del resto de las Islas. Así, se detectaron focos de microalgas en la playa de Las Vistas (Arona), en la zona sur de La Gomera o en Las Canteras (Las Palmas de Gran Canaria), generando la alarma por su mal aspecto y su olor fétido, si bien los expertos insisten en que no se trata de ningún vertido de carácter tóxico o dañino.
La situación no es nueva y se viene repitiendo cada verano en los últimos años.
Personal de los Ayuntamientos de Arico y de Granadilla de Abona tomaron muestras del agua del mar afectadas por las microalgas, si bien los resultados no se conocían todavía ayer, motivo por el cual sus alcaldesas, Olivia Delgado y Jennifer Miranda, respectivamente, aseguraron que esperarán a tenerlos antes de eliminar las restricciones al baño, priorizando la salud de los usuarios de las playas y otras zonas del litoral.
Por la mañana, Miranda subrayó que “según los primeros análisis, la calidad del agua es excelente y todo apunta a que se trata de microalgas y que no guardan riesgo alguno para la salud”. Delgado explicó que “por la tarde, apenas se perciben, según la inspección de la Policía Local. Hemos tomado muestras y esperaremos, de manera preventiva, antes de levantar la recomendación de no bañarse”.
“Cambio anómalo en el color del agua, aspecto viscoso y fuerte olor”
“Las microalgas, identificables por el cambio anómalo en el color del agua, se caracterizan por sus tonalidades pardas y marrones, así como por su aspecto viscoso y el fuerte olor emanado de su condensación, han motivado esta recomendación de seguridad emitida por la Alcaldía”, así explicaba ayer el Ayuntamiento de Arico la decisión de recomendar de no bañarse en las aguas del municipio, al igual que lo han hecho otros afectados por este fenómeno, como Las Palmas de Gran Canaria o Granadilla de Abona, que ha prohibido meterse en el mar.
La alcaldesa Olivia Delgado explicó que “los servicios de seguridad municipal han estado monitoreando de cerca la situación y que, en concordancia con su compromiso con la prevención para el mejor disfrute de nuestras playas, se ha decidido desaconsejar el baño en las áreas afectadas hasta que los niveles de la concentración de microalgas desaparezcan”.
Delgado detalló que “ se ha procedido a tomar muestras en diversas playas del municipio para su análisis con el objeto de confirmar si se trata de microalgas y descartar posibles afecciones a las personas y al medio. El consistorio seguirá monitoreando la situación e irá actualizando la información sobre las condiciones de nuestro litoral”.