Millones en inversión se van por retrasos en licencias de hasta tres años

Hace unos meses, la alcaldesa de Granadilla de Abona daba la voz de alarma ante el retraso en la resolución de licencias de obra mayor en su municipio. Jennifer Miranda explicaba que se había encontrado ante un embudo administrativo en el que los particulares entran y tardan hasta tres años en salir, sin obtener respuesta acerca de qué ocurre con los proyectos que han emprendido. Es decir, que empresarios y ciudadanos esperan sin saber qué dirá la Administración acerca de inversiones que quieren efectuar en la construcción de su casa, de un conjunto de viviendas, hoteles o cualquier otra.

Muchos millones de euros paralizados, principalmente en los municipios en los que la situación se encuentra peor, por este orden: Arona, la propia Granadilla y Arico. Cada uno con una casuística diferente. Adeje, ejemplo de buena gestión En el lado contrario, Adeje, al que los constructores consideran un modelo de gestión, en el que los tiempos legalmente establecidos se cumplen en tiempo y forma. La legislación es clara. La solicitud de licencia de obra mayor es obligatoria en los casos que se establecen. Por ejemplo, la construcción y rehabilitación de un edificio y no debe tardarse más de tres meses en resolverse, un plazo que no cumple casi ningún ayuntamiento. Las demoras generan perjuicios a quienes pretenden iniciar la actividad económica, a las empresas vinculadas al proyecto, causa sobreprecios (por ejemplo, para quienes compran una vivienda) y daña el flujo de ingresos de la propia Administración.

Ante esta situación, en muchos municipios del sur de Tenerife los inversores están adoptando decisiones de marcharse en busca de otros lugares. Los más cercanos, a municipios colindantes, como los casos de Adeje o San Miguel de Abona. Los más lejanos, Marruecos. En cuanto a destinos dentro de España, municipios del litoral de la provincia de Málaga. Así lo explica el presidente de la Federación Provincial de Entidades de la Construcción de Santa Cruz de Tenerife (Fepeco), Óscar Izquierdo. “La Administración no funciona bien” “Tenemos millones de euros sobre la mesa de los funcionarios”, dice Izquierdo, para quien “la propia Administración está paralizando la actividad y el crecimiento. Hay que reformarla porque es incapaz de funcionar con diligencia. El municipio con la situación más dramática es Arona y, después, Granadilla de Abona y Arico”, asegura. En los dos últimos casos, considera que el problema es de gestión.

Sobre Granadilla, dice que “estamos muy esperanzados con el nuevo gobierno municipal y que con que pueda resolver todas las licencias. Granadilla tiene una enorme potencialidad y tiene dimensiones para disponer de un Gerencia de Urbanismo con todos los instrumentos y el personal técnico especializado”. “Arico -agrega- se ha convertido en un municipio atractivo para la inversión, pero no cuenta con la estructura suficiente para sacar las licencias en tiempo y forma”, manifiesta Izquierdo. Arona es un caso aparte.

El presidente de Fepeco considera que es un municipio lastrado “por décadas de frentismo político y con una situación judicial muy complicada, que ha tenido una repercusión enorme” en su situación urbanística. “El plan parcial El Mojón, que haría de Arona la capital económica de Tenerife, tarda más que las pirámides de Egipto”, asegura, para recordar la “grave situación habitacional que hay en el Sur”. “Hemos pedido al Gobierno de Canarias la reforma de la Administración pública, para que dote a los ayuntamientos del personal para resolver las licencias” que ahora se demoran varios años. “También se retrasan -recuerda- por motivo de otras Administraciones. Por el tiempo que tardan en evacuarse los informes de otras, como el propio Ejecutivo o los cabildos”.

“El Sur sufre una situación de emergencia habitacional: no hay viviendas”

El presidente de la patronal provincial de la construcción (Fepeco), Óscar Izquierdo, tiene muy claro que “el sur de Tenerife vive una situación de emergencia habitacional” ante la falta de vivienda, con una necesidad de “miles” de ellas para “los trabajadores del sector turístico”, muchos de los cuales se ven abocados a dormir en sus vehículos, como coches y furgonetas, tal y como puso de manifiesto este periódico semanas atrás.

A su juicio, cuando quienes trabajan en un lugar, se ven obligados a habitar a muchos kilómetros, se producen las ya clásicas colas en la autopista, la TF-1, además de accidentes.
“La Administración debe facilitar el acceso de los ciudadanos a derechos fundamentales, como es el de la vivienda. Pero en este caso no es que no lo haga, sino que es el principal obstáculo”, dice Óscar Izquierdo, quien compara las gestiones de dos municipios vecinos con dos situaciones diametralmente opuestas, como Adeje y Arona.

“Son vecinos y en uno -Arona- se tardan tres años en salir adelante las licencias de obra mayor, mientras que en el otro todo se hace perfectamente”, indica. “Ahí se ve -agrega- que en la política cuenta mucho la persona”, en relación al alcalde de Adeje, José Miguel Rodríguez Fraga.

Dos municipios con las mismas leyes

“Hay que tener en cuenta que los dos se rigen por las mismas leyes y, sin embargo, en uno es imposible y en el otro todo sale perfecto”, subraya. El presidente de Fepeco insiste en que es totalmente necesario acometer la reforma de la Administración pública de Canarias, de manera que la gestión de los ayuntamientos en materia urbanística deje de ser un asunto fallido. Y que en ese modelo el Gobierno debe dotar de técnicos a los municipios.