Numerosos vecinos de Santa Cruz se han visto sorprendidos en las últimas horas por la presencia de vikingos en Tenerife. No es la primera vez que esto ocurre, pero existe una explicación sencilla para ello.
A la altura del edificio Mapfre, un drakar, un barco de asalto utilizado por este pueblo europeo, se alza, majestuoso y llamativo. Su característico perfil y sus vivos colores han provocado numerosas preguntas: ¿está aquí por Carnavales? ¿Forma parte del atrezzo de alguna serie de televisión o película que se rueda en la Isla?
La respuesta es más sencilla. El barco de vikingos en Tenerife que se usa para excursiones en el sur de la Isla se encuentra en tareas de mantenimiento y reparación, algo que se lleva a cabo en el Puerto de Santa Cruz de Tenerife, lugar puntero a nivel nacional para este tipo de trabajos.





