La diabetes es una de las principales preocupaciones de salud pública en Canarias, dado que ha aumentado en las últimas décadas. Se calcula que hay entre 200.000 y 230.000 diabéticos en Canarias, casi el doble de la media nacional, recordando que existe un infradiagnóstico y muchos canarios y canarias desconocen que sufren esta patología (los síntomas pueden ser leves o estar latentes). El registro de historia clínica del SCS contabiliza 174.343 pacientes diagnosticados y tratados de diabetes mellitus tipo 2. Por otro lado, un factor genético explicaría que la diabetes tipo I despunte entre los menores y que su incidencia sea la más alta de España.
La consejería de Sanidad, a través de las direcciones generales de Salud Pública, del Paciente y Cronicidad y de Programas Asistenciales del SCS, en coordinación con la Federación de Asociaciones de Diabetes de Canarias (FAdiCAN), ha puesto en marcha la campaña La diabetes y el bienestar, un lema que busca abordar las tres dimensiones del bienestar: el físico, enfocado a mejorar los hábitos de vida saludables; el social, analizando los desafíos que puede suponer la patología; y el bienestar psicológico, examinando las consecuencias emocionales.
La diabetes va más allá de la glucemia. Puede afectar a todos los aspectos de la vida: físico, emocional, social, laboral, escolar… disminuyendo su bienestar. No se puede descansar de tener diabetes y las personas con diabetes tienen que ser organizadas, resistentes y responsables para lograr el éxito en su gestión.
Resulta imprescindible sensibilizar a los ciudadanos sobre la importancia de la prevención de la diabetes y la adopción de hábitos de vida saludables, la importancia del diagnóstico precoz, de la atención y el bienestar de estas personas.
El SCS cuenta con dispositivos para el autocontrol y seguimiento de las personas con diabetes, tales como sistemas de monitorización de glucosa y bombas de infusión continua de insulina. Durante 2024, se han prescrito 2.850 sistemas de monitorización de glucosa, casi se han triplicado las prescripciones de sensores en el ámbito hospitalario y de Atención Primaria respecto a 2023.
El grupo técnico encargado de su indicación aprobó entre enero y octubre de 2024 un total de 503 solicitudes: bombas de insulina (103) y especialmente las que van unidas a un sensor (275) y los sensores continuos de glucosa (116). Se solicita cada vez más para población infantil (281) y mujeres gestantes (24).