El vicepresidente de EAPN-Canarias, Fernando Rodríguez, recalcó durante unas jornadas sobre la pobreza infantil celebradas en la Universidad de La Laguna que “si no ponemos remedio, las niñas, niños y adolescentes que hoy se encuentran en situación de pobreza, de adultos lo seguirán estando”.
Destacó que los principales indicadores de pobreza y exclusión social “evidencian la elevada vulnerabilidad a la que se enfrentan las niñas, niños y adolescentes en Canarias”. La pobreza infantil es el inicio de “un ciclo difícil de romper, que suele mantenerse a lo largo de toda la vida” debido a que estos niños, niñas y adolescentes “parten de una situación de desventaja, sufren segregación y situaciones de discriminación”, que implica que las condiciones de pobreza y exclusión social de los progenitores las hereda su descendencia.
Fernando Rodríguez abogó por la implicación de todos los niveles de las administraciones públicas para reducir la pobreza infantil. “Si se eliminasen todas las ayudas y prestaciones (maternidad, cuidado de menores, asistencia social, vivienda, IMV, RCC, etc.), la pobreza infantil aumentaría 7,8 puntos”. Estas ayudas y prestaciones han evitado que 27.000 niñas, niños y adolescentes más cayeran en pobreza en 2023. “Pese al aumento de estas ayudas y prestaciones, su impacto en la reducción de la pobreza infantil aún es escaso”, lamenta.
Para reducir las situaciones de pobreza infantil en Canarias, desde EAPN-Canarias se propone en primer lugar reforzar y garantizar una educación pública, inclusiva, universal y gratuita en todos los niveles educativos y todas las etapas de la vida, así como poner en marcha mecanismos para reducir el fracaso escolar y abandono educativo temprano de la educación. Además pide incrementar la inversión, la calidad y la extensión en la cobertura de la prestación por hijo o hija cargo, ampliar la protección social de las familias y el apoyo a la crianza, así como promover la atención integral a los niños, niñas y adolescentes extranjeros no acompañados y fomentar la atención integral a jóvenes extuteladas con su acompañamiento a una vida adulta libre de pobreza.
Multifactorial
En la misma línea, el sociólogo Pau Marí Klose, señaló que “al ser la pobreza infantil un problema complejo y multifactorial, la respuesta debe ser igualmente variada” y, por ello son necesarias “medidas que vayan más allá de las directamente dedicadas a la propia pobreza infantil e incidan en situaciones que la afectan, como la educación, la vivienda, el trabajo y la renta familiar”.
Considera que las administraciones deben “adoptar medidas contra la pobreza infantil y la desigualdad en general: el desempleo crónico, los contratos temporales y los salarios bajos”. Abogó por “crear ayudas específicas” para hogares con menores, como la prestación por hijo o hija cargo, ayudas para el transporte y material escolar, y otras transferencias para mitigar los gastos de los hogares empobrecidos”.
La Consejería de Bienestar Social, Igualdad, Juventud, Infancia y Familias está impulsando acciones específicas para contribuir a luchar contra la pobreza infantil en el marco de la Estrategia de Infancia, Adolescencia y Familia (2019-23), o dentro del programa del Fondo Social Europeo abordar la exclusión social de menores, o la desinstitucionar la infancia y la adolescencia tutelada.