El presidente del CD Tenerife, Paulino Rivero, ha visitado este viernes el entrenamiento del primer equipo para dar ánimos a la plantilla ante la delicada situación deportiva que vive en LaLiga Hypermotion, y posteriormente reconoció que el equipo “no ha estado a la altura” de lo que se esperaba de él.
Con solo diez puntos sumados de 45 posibles, el conjunto blanquiazul, que este sábado recibirá al Elche, es el penúltimo clasificado de Segunda División, igualado con el colista Cartagena, y está a siete puntos de la zona de permanencia, aunque con un encuentro pendiente de jugar frente al Levante en el estadio Heliodoro Rodríguez López.
“No hemos estado a la altura de lo que los aficionados esperan y de lo que el club merece”, admitió el dirigente tinerfeño a los medios oficiales de la entidad.
Rivero sostiene que el equipo entrenado por Pepe Mel ha demostrado que es capaz de sacar adelante partidos pero “de forma aislada”, y lo que necesitan es “continuidad” para revertir la comprometida situación.
“Es necesario que los jugadores se lo crean y tengan confianza en ellos mismos, porque pueden y quieren, por lo tanto, el éxito tiene que llegar”, explicó.
También se refirió al factor suerte, “que es necesario que nos acompañe, pero hay que buscarla”, matizó, así como que la afición necesita a ver a su equipo “comprometido” sobre el campo.