Más de tres años después de la erupción del volcán de La Palma en septiembre de 2021, La Palma celebra la primera cosecha de 195 piñas de plátanos en una finca de Las Hoyas, situada en el Valle de Aridane, que ha sido reconstruida sobre las coladas.
Desde abril de 2024, cuando se sembraron los cultivos en los terrenos ocupados por la lava, los agricultores han enfrentado retos como enfriar la tierra, nivelar el terreno, construir infraestructuras de riego y levantar nuevos muros para contener el suelo fértil que se extiende sobre la colada en un proceso conocido como “sorriba”.
Desde la organización de productores de plátanos de Canarias Europlátano, asociada a la primera finca en producción, consideran que “el esfuerzo conjunto entre los productores locales y el apoyo de instituciones públicas y privadas ha sido clave para evitar la paralización de la actividad agrícola en gran parte del Valle de Aridane tras la erupción”.
Además, han hecho un llamado a las administraciones públicas a reforzar el compromiso con la agricultura canaria para asegurar la continuidad de la reconstrucción agrícola de La Palma mediante una gestión coordinada y un apoyo financiero sostenido.
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