La Fiscalía de Santa Cruz de Tenerife ha solicitado 3,5 años de prisión para un hombre acusado de alquilar dos inmuebles que no eran de su propiedad o, alternativamente, 2 años de cárcel si se le condena por blanqueo. En cualquier caso, el Ministerio Público exige el pago de casi 2.000 euros a las mujeres engañadas.
La primera denunciante se interesó por un inmueble que se anunciaba en internet con la finalidad de destinarlo a vivienda habitual. Para ello, contactó con el encausado a través de una aplicación de mensajes y del teléfono móvil de su titularidad, aunque se identificó con otro nombre.
Simulando ser propietario del inmueble pidió a la perjudicada 1.020 euros en concepto de alquiler. La mujer, creyendo que hablaba con el propietario, realizó dos transferencias bancarias: una por valor de 680 euros y otra por 340 euros. A partir de ese momento, el acusado bloqueó la aplicación y no le llegó a alquilar nunca la vivienda.
La segunda perjudicada también se interesó por un inmueble que un conocido del acusado ofrecía a través de internet y, tras hablar con él, le hizo dos transferencias por valor de 680 y 340 euros, tras lo cual también bloqueó la aplicación y tampoco le permitió acceder a la vivienda.