La ruta canaria, 30 años de migración y muerte. Ese es el descriptivo título con el que una docena de fotoperiodistas comparten sus miradas con el espectador en una exposición que ilustra un drama. Una tragedia cotidiana que sufren muchos seres humanos, ante la que, precisamente por su naturaleza reiterativa, hay que evitar el riesgo de inmunizarse, de sacar lo peor de cada uno para ocultarla, negarla y hasta convertir a las víctimas en sospechosas. Por mucho que los vientos soplen últimamente en esa dirección.

El Museo de Naturaleza y Arqueología (MUNA), en la capital tinerfeña, ofrece hasta el 18 de mayo este proyecto expositivo, de la mano de Presidencia del Gobierno de Canarias y comisariado por la fotoperiodista Desirée Martín. Tenerife es la tercera isla que recibe La ruta canaria, 30 años de migración y muerte, tras presentarse el pasado agosto en el Faro de la Entallada, en Fuerteventura, y, de diciembre a enero pasados, en Casa África, en Las Palmas de Gran Canaria, para convertirse en la exposición más vista en la historia de la entidad, con cerca de un millar de visitantes.
Las imágenes, señala José Naranjo, “tienen la extraña virtud de retratarles a ellos, pero también a nosotros”
La muestra se inauguró el 14 de marzo, en un acto que contó con la participación, entre otras personalidades, del viceconsejero de Presidencia del Gobierno de Canarias, Alfonso Cabello; el viceconsejero regional del Gabinete de la Presidencia, Octavio Caraballo; el consejero de Cultura y Museos del Cabildo de Tenerife, José Carlos Acha, y el director del museo, Conrado Rodríguez.
CONTRA LA XENOFOBIA
Ese mismo día, el MUNA albergó la presentación del libro Tratamiento ético de la inmigración en los medios, del profesor de la Universidad de La Laguna (ULL) Rodrigo Fidel Rodríguez Borges. España, y Canarias de forma particular, se ha convertido en una sociedad plural que convive con la diversidad. Sin embargo, para que esta convivencia no ceda ante la amenaza de los discursos populistas y xenófobos, es fundamental la labor de los medios de comunicación. La publicación analiza el discurso contrario a la inmigración y hace hincapié en el tratamiento de los medios de comunicación sobre esta realidad.
La exposición ya ha visitado tres islas desde el pasado mes de agosto: Fuerteventura, Gran Canaria y Tenerife
Rodríguez Borges propone 10 criterios de actuación que pueden ayudar a los profesionales de los medios y estudiantes de Periodismo a mejorar su trabajo desde la perspectiva de la ética de la comunicación y los derechos humanos.

En agosto de 2024 se cumplieron tres decenios desde que una patera partió de la costa del Sáhara Occidental y alcanzó Las Salinas del Carmen, en Fuerteventura, con dos personas a bordo. Se abría así un corredor entre África y Canarias que se ha convertido en el más peligroso y mortífero del mundo.
El MUNA presentó el libro ‘Tratamiento ético de la inmigración en los medios’, de Rodrigo Fidel Rodríguez Borges
La ruta canaria, 30 años de migración y muerte representa un viaje por el movimiento migratorio en las Islas, acompañado por textos de los autores y autoras de las fotografías como elementos de apoyo para la comprensión del trayecto que realizan las personas migrantes, así como una contextualización sobre las razones que les mueven a salir de su país.

Como señala el Premio Canarias de Comunicación, experto en el fenómeno migratorio, José Naranjo, las imágenes que recoge este proyecto expositivo “tienen la extraña virtud de retratarles a ellos, pero también a nosotros. A fuerza de blindarnos, convertimos el sueño natural de migrar en una odisea de supervivientes y muertos”.
Este conjunto de fotos, indica el periodista, “es un deber de la memoria. No es solo cuestión de asomarse y mirar. Se trata de ver. Solo desde la comprensión global del hecho migratorio, de su complejidad vinculada a un mundo profundamente injusto, podremos reaccionar”.

MIGRACIONES
Tras su paso por Casa África, la exposición “ha ido mutando” con la incorporación de nuevos elementos hasta ofrecer en Tenerife un completo documental del movimiento migratorio del ser humano. El MUNA plantea, de esta manera, una perspectiva histórica de la migración y cuenta, para ilustrar la divulgación de dicho proceso, con una instalación animada sobre la corriente atlántica desde los primeros pobladores de Canarias. En la exposición tiene cabida, asimismo, una mirada histórica del movimiento migratorio de los canarios hacia Sudamérica.

La comisaria de La ruta canaria, 30 años de migración y muerte hizo hincapié durante su apertura en la acogida positiva que está teniendo la exposición, cuyo eje es “la lucha contra la desinformación”. Las fotografías, explicó Desirée Martín, “no solo reflejan la llegada de los migrantes, sino su recorrido vital hasta alcanzar las Islas”.
“Estas imágenes -expuso Alfonso Cabello- evidencian que Canarias precisa de solidaridad y compromiso, tanto del Estado como del resto de las comunidades autónomas y de la Unión Europea”.
AGENDA DE ACTIVIDADES COMPLEMENTARIAS
En torno a La ruta canaria, 30 años de migración y muerte se han programado diversas actividades. Como las dirigidas a los grupos escolares que la visiten. También se han organizado tres rutas guiadas por la exposición a cargo de los autores (los días 29 de marzo, 5 de abril y 3 de mayo) y una masterclass de Andrés Gutiérrez sobre fotoperiodismo y migración, así como un encuentro con distintas personas que participan en la primera atención que se ofrece a los migrantes desde que son localizados en el mar hasta que pisan tierra.