
Uno de los proyectos más esperados por los chicharreros es la ampliación de la plaza de España hasta el mar, con el fin de recuperar la conexión del centro de la ciudad con su costa, lo que en estos momentos es imposible. Tras un concurso de ideas, desde las administraciones públicas se decidió apostar por el proyecto de Herzog & de Meuron, que resultó ganador del certamen. Pese a ello, en estos momentos este diseño original no se va a poder plasmar en las mismas condiciones ideadas por los arquitectos suizos.
El principal escollo a esta iniciativa es la altura actual del túnel de la Vía Litoral, ya que según las fuentes consultadas por este medio supera en más de un metro lo previsto en un primer momento. Esto puede suponer que la proyección de conexión con el mar no será en descenso desde la mencionada plaza, como así estaba ideado, sino que este recorrido decreciente partirá desde la parte superior al túnel.
No obstante, este inconveniente ha sido tenido en cuenta por el Cabildo tinerfeño a la hora de redactar los proyectos de ampliación de la plaza, modificando algunos de los aspectos iniciales, con el fin de conseguir finalmente el objetivo deseado, que no es otro que unir la ciudad con el mar. Precisamente, el documento constructivo de la segunda etapa de la primera fase está pasando los informes técnicos, con el fin de que pueda salir a licitación en los próximos meses. Además, la Institución insular trabaja ya en la redacción de la tercera fase, puesto que se pretende iniciar estas obras cuanto antes.
Una de las principales críticas con esta modificación obligada que tendrá que soportar la iniciativa es la de la portavoz del Grupo Popular en el Cabildo, Ana Zurita, quien achacó estos problemas a la falta de coordinación entre las administraciones. La también arquitecta llamó la atención sobre el hecho de que el Gobierno de Canarias elevó el túnel de la Vía Litoral en algo más de un metro sobre lo previsto por motivos económicos, según la información que ha podido conocer. Recordó que la idea de los arquitectos suizos era plasmar como una especie de río de lava que terminara en el mar, lo que ahora no se puede hacer porque lo impide la altura del túnel. A su juicio, ahora el proyecto constructivo deberá modificarse para adaptarse a la realidad. Cuestionó que esta superficie del túnel impedirá que desde la actual plaza de España se pueda ver el mar y “de hecho, ahora solo vemos los mástiles de los barcos”.
Más coordinación
Esta situación es la que ha motivado al PP a preparar una propuesta con el fin de que las administraciones públicas implicadas, tales como el Cabildo, el Ayuntamiento de Santa Cruz, el Gobierno de Canarias y la Autoridad Portuaria, coordinen más las actuaciones relacionadas con la costa, para evitar situaciones como esta. Además, el PP pedirá que sea la Corporación insular la que lidere este proceso en todas aquellas obras importantes relacionadas con el mar en la Isla.
Por su parte, el director insular de Fomento, Miguel Becerra, negó la falta de coordinación en el proyecto de la plaza de España y aseguró que las instituciones se reúnen cada semana. Recalcó que en el diseño original no se habían previsto los túneles, puesto que no era un proyecto constructivo y no se conocía esta iniciativa y, aunque reconoció que la altura de la Vía Litoral es superior a la inicial, el documento actual ha tenido en cuenta este detalle y a partir del mencionado punto conflictivo se iniciará el descenso hacia el mar para culminar en el futuro puerto deportivo.
Búsqueda de soluciones
El presidente del Colegio de Arquitectos de la provincia tinerfeña, Argeo Semán, confirmó que la altura del túnel limitará la actuación prevista por Herzog y De Meuron, aunque manifestó que aún es posible buscar una solución técnica para solventar este inconveniente e insistió en la importancia de que la capital recupere su conexión con el mar. Señaló que “no ha habido la suficiente coordinación en este tema y recalcó que, además, la Autoridad Portuaria “siempre ha actuado como una república independiente”. Semán explicó que la elevación, con respecto a la idea original del túnel, estuvo motivada en una decisión económica, ya que el hecho de bajar la cota suponía una inversión mayor, según los datos que ha podido conocer al respecto.
Además, el arquitecto criticó que se haya optado por invertir entre seis y siete millones de euros en una estación de cruceros provisional, cuando en el proyecto de los arquitectos suizos se ubica en otro espacio. Por último, Semán demandó más información y transparencia a las administraciones públicas para conocer cómo se ha proyectado la ampliación de la plaza de España, con el fin de poder hacer sugerencias.
[su_note note_color=”#d0d3d5″ radius=”2″]Los arquitectos pretendían evocar un “flujo de lava o una extensa playa”
Tal y como se recoge en el proyecto de Jacques Herzog y Pierre de Meuron, la ida era reflejar que la plaza de España se deslice hacia el puerto y el mar como “una capa paisajística por encima del tráfico subterráneo”. Plantearon que “la superficie de esta capa se estructura como una superficie artificial, que evoca un flujo de lava o una playa extensa: la nueva playa de Santa Cruz, con muchas instalaciones y servicios ciudadanos, tales como cafés, bares quioscos, casillas de espera, puntos de encuentro, lagares de almacenamiento y estacionamiento para las grandes fiestas de la ciudad como el Carnaval o el concierto de Navidad”. Se pretende, así, que todos los servicios estén configurados como pabellones que se anidan en la capa de la plaza y que presentan formas muy diversas, pero que siempre guardan un parentesco cercano con formas de la naturaleza.[/su_note]