El Ayuntamiento de Santa Cruz de Tenerife ha iniciado los trabajos para la instalación de un ascensor en la entrada principal del Parque Marítimo, lo que permitirá mejorar la accesibilidad de los usuarios, con una comunicación directa desde los aparcamientos con la zona de piscinas.
El concejal de Accesibilidad, Carlos Correa, explica que este proyecto “obedece a la necesidad de facilitar el paso de las personas con movilidad reducida y va incluido en la batería de medidas contempladas en el Plan de Accesibilidad de la ciudad. Esta es una obra muy necesaria en la que, por fin, se garantizará el acceso a las personas con discapacidad física o movilidad reducida por la puerta principal, como debe ser”.
Además, el noveno teniente de alcalde y presidente del consejo de administración del Parque Marítimo, Alfonso Cabello, indica que tanto el Palmetum como el Parque Marítimo “se encuentran en un claro proceso de mejora. Vamos rápido en este aspecto concreto de la accesibilidad, pero es solo una parte de un proyecto mucho más amplio que está relacionado con que todos los vecinos y visitantes de la ciudad puedan disfrutar del mar y de un jardín botánico en las mejores condiciones posibles”.
Del mismo modo, también se han ejecutado durante los últimos días distintas mejoras para facilitar la accesibilidad de todo el recinto. Correa enumeró, por ejemplo, que las duchas “se han conseguido adaptar eliminando el escalón que existía y también se han instalado rampas y pasamanos en la cafetería y varios bancos de la zona de descanso”.
El Parque Marítimo disponía, hasta este momento, de un acceso lateral, junto al Castillo Negro, para el acceso de personas con problemas de movilidad, pero no así por la entrada principal.
El nuevo ascensor, que no necesita de cuarto de máquinas, mejorará las condiciones de accesibilidad existentes entre el aparcamiento y las instalaciones de Parque Marítimo, salvando un desnivel de una planta de altura (4,25 metros). El acceso por el aparcamiento se rematará también con una jardinera y se colocará una barandilla de estructura de aluminio con cristal, con una altura total de un metro. El espacio donde irá ubicado el ascensor se rematará también con una visera de 0,80 metros de vuelo.
Para evitar el impacto visual del ascensor, todos sus cerramientos deberán realizarse con materiales traslúcidos, con el fin de facilitar su integración con el paisaje y también para garantizar la iluminación de las dependencias existentes en la planta inferior.
El presupuesto de los trabajos de instalación del ascensor es de 48.000 euros y se espera que pueda estar en funcionamiento en los próximos meses.
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