“Trabajamos, decidimos”

Miles de personas se manifestaron ayer en las dos capitales canarias, con motivo del Primero de Mayo, para exigir la derogación de las reformas laborales y la recuperación de derechos y libertades perdidos durante la crisis, así como reclamar subidas salariales que acaben con la precariedad laboral. Los líderes UGT y CC.OO. en las Islas, Gustavo Santana y Carmelo Jorge, respectivamente, encabezaron las dos manifestaciones que se celebraron en Las Palmas de Gran Canaria y Santa Cruz de Tenerife, junto con las fuerzas sindicales Cobas, FSOC, CUO, USO Canarias y CSIF.

El sindicato nacionalista Intersindical Canaria, como en ocasiones anteriores, optó por convocar una protesta paralela en la capital grancanaria, que reunió a unas 1.000 personas, según los manifestantes, bajo el lema Aquí trabajamos, aquí decidimos.

Las manifestaciones convocadas por las dos centrales sindicales mayoritarias en unión de otras fuerzas reunieron a unas 3.000 personas en Las Palmas de Gran Canaria, según fuentes de la Policía Local y de UGT, y a unas 2.000 en Santa Cruz de Tenerife, según el líder de CC.OO. en Canarias, Carmelo Jorge. Una asistencia que, aunque para los sindicatos es elevada y demuestra el “hartazgo” de la ciudadanía por las políticas de empleo, se aleja bastante de la que había al principio de la crisis. De hecho, en el caso de Santa Cruz de Tenerife se puede decir que había más gente en el parque García Sanabria viendo la exposición de flores y Los Gorgoritos que en la concentración.

Aun así, Gustavo Santana confía en que con los “abusos” de la patronal y los casos de corrupción “las movilizaciones sindicales vayan a más y concluyan en una huelga general”.

El 25% de la población se encuentra en situación de desempleo en las Islas, donde más del 90% de los contratos son de carácter temporal y el 25% de ellos no llega ni a una semana, recalcó el líder de CC.OO. Jorge incidió en la situación de los jóvenes en el Archipiélago y lamentó que más del 60% de ellos estén en paro o “instalados permanentemente en la precariedad”, sin expectativas, que hace que muchos de ellos se vean obligados a emigrar. Las dos manifestaciones convocadas por las centrales mayoritarias fueron encabezadas por una pancarta que rezaba Primero de Mayo, unidad sindical por empleos y salarios dignos, y por algunos políticos. Entre ellos, el diputado nacional del PSOE Sebastián Franquis, la también diputada nacional de Podemos Meri Pita, militantes de IUC, republicanos y miembros del Partido Comunista del Pueblo Canario y de Unificación Comunista de España.

El líder de Comisiones en Canarias destacó que no hay motivo para “convivir ni con la pobreza ni con la exclusión social ni con la inseguridad laboral en una sociedad avanzada como la nuestra, ni tampoco para resignarnos”, y lamentó que la riqueza se quede en “las mismas manos que antes de la crisis”.

José Ramón Rodríguez, secretario general de USO Canarias, recalcó la importancia de parar los efectos “de esta perversión que la han llamado crisis económica” y revertir y recuperar buena parte de los derechos que se han quedado por el camino. El representante de USO, que secundó la protesta en Tenerife, cuestionó, además, la política del Gobierno canario “por poner todos los huevos en la cesta del turismo”, un sector que, reconoció, ha contribuido a paliar la crisis. Gustavo Villalobos, portavoz en la manifestación por parte del CSIF, admitió que “es penoso” que la gente no apoye a los sindicatos que han llevado la lucha obrera siempre adelante, al tiempo que recordó que Canarias cuenta con 102.000 hogares con todos sus miembros en paro.

Luis Serichol, portavoz de la Asociación para la Defensa de las Pensiones Públicas, decidió apoyar la manifestación para así abogar “por el derecho a un sistema público de pensiones”.

La movilización de Santa Cruz estuvo apoyada también por afectados del sector de la estiba, quienes, con llamativas camisetas naranjas en las que se leía Ni un paso atrás, reclamaron consenso para abordar la reforma de la estiba que plantea el Gobierno central mediante decreto ley y que afecta en Canarias a unos 800 trabajadores.

Los sindicatos amenazan a los empresarios con un calvario si no suben los sueldos

El secretario general de CC.OO., Ignacio Fernández Toxo, y el de UGT, Pepe Álvarez, advirtieron ayer a los empresarios que sufrirán “un calvario” si no aumentan los salarios en el proceso de negociación colectiva que mantienen abierto, según recogió Europa Press. El líder de UGT afirmó que la CEOE tiene que saber que “si no hay un convenio marco que sirva de paraguas para la negociación colectiva, el proceso de negociación de los convenios sectoriales y de empresa se va a convertir en un calvario para los empresarios”. “No vamos a permitir que los incrementos de los beneficios de las empresas hayan alcanzado los niveles de 2008 y que los salarios no tengan su correspondiente aumento que permita volver a equilibrar la situación en la que estamos en estos momentos”, recalcó Álvarez.

Los líderes sindicales han explicado que este Primero de Mayo, Día Internacional del Trabajador, tiene que servir para “dejar claro” que “sin movilización no hay avance” y que estas van a continuar. Los sindicatos convocaron ayer más de 70 manifestaciones en toda España, para exigir la recuperación de derechos, la mejora de la situación económica y social de los ciudadanos y para denunciar la corrupción que sufre España. Con el lema No hay excusa. A la calle, unas 12.000 personas, según la Delegación del Gobierno, y unas 50.000, para los sindicatos, secundaron la convocatoria a la que también asistieron Pablo Iglesias, líder de Podemos; Miguel Gutiérrez, representante de Ciudadanos; Ángel Gabilondo, del PSOE, y el coordinador federal de IU, Alberto Garzón.

Sobre la corrupción, ambos sindicatos han sido especialmente duros con el PP y aseguraron que “no se puede permitir ni un día más esta pornografía”. Toxo dejó claro que el país está viviendo una situación que se caracteriza por el paro y ahora por el “tufo de corrupción”.