La Confederación Española de Policía (CEP) afirma que el reciente motín ocurrido en el centro de menores de Valle Tabares ha evidenciado fallos en el sistema de seguridad, hasta el punto de que tuvieron que intervenir efectivos policiales de La Laguna y Santa Cruz de Tenerife.
El sindicato afirma que el servicio de seguridad y protección interno está adjudicado a una empresa de seguridad privada además de las funciones establecidas para el personal educativo y, por ello, cree que hay que “empezar a trabajar” y establecer un protocolo de actuación, “rápido y acorde a la situación actual, revisable cada cierto tiempo”.
“Es así como podremos afrontar situaciones como la ocurrida el pasado día 28 de diciembre con la máxima celeridad, minimizando los riesgos para todos al mínimo”, indica.
La CEP recuerda en un comunicado que en 2012 ya hubo varios altercados en el centro y otra sublevación en 2015.
“Cuando pensábamos que la situación se había normalizado permanentemente, resurgen de nuevo los problemas y nos muestran un escenario de preocupación que este sindicato policial escudriñará para la seguridad de todos”, expone.