El parque etnográfico, y desde hace unos años jardín botánico, Pirámides de Güímar celebró ayer, en una fecha tan remarcada como el Día Mundial del Agua, su vigésimo aniversario. Durante el acto, el director científico del parque, David Valcárcel, repasó el pasado, presente y futuro de Pirámides de Güímar, desde que lo ideara el explorador noruego Thor Heyerdahl, hasta nuestros días, en donde ha crecido como jardín botánico, entre otras razones gracias a la colaboración con la Universidad de La Laguna y en particular con el profesor de Botánica, Wolfredo Wilpret, a quien ayer tarde sorprendieron poniendo su nombre a la ruta volcánica, una de las cuatro que se pueden visitar en el parque situado en Chacona, y que ya cuenta en su todavía joven vida con dos nominaciones internacionales a los premios europeos de mejor museo y mejor jardín botánico.
El acto, celebrado en el auditorio del parque, contó además con la intervención de Benito Cabrera y José Manuel Ramos, quienes añadieron la nota musical a la celebración y como broche de oro a la jornada se inauguró el Tropicarium, el primer proyecto botánico desarrollado en el parque desde que se convirtiera oficialmente en Jardín Botánico en 2017.
El Tropicarium ha sido creado dentro del convenio de colaboración suscrito entre Pirámides de Güímar y la Universidad de La Laguna, y ha sido codirigido por los profesores Wolfredo Wildpret y Victoria Eugenia Martín.
Este espacio singular, pequeño y cerrado, muestra algunas de las estrategias de vida que utilizan las orquídeas y las plantas carnívoras (insectívoras) para sobrevivir en condiciones tropicales. También desvela por qué estos dos grupos de plantas llamaron la atención de Charles Darwin. En esta nueva exposición presenta plantas de un modo nunca visto anteriormente en Canarias, recreando un auténtico clima tropical, integrando a las plantas en un espacio de lavas volcánicas.
El aniversario contó con la participación del presidente del Cabildo, Carlos Alonso, la alcaldesa de Güímar, Carmen Luisa Castro, el empresario Fred Olsen, el catedrático Wolfredo Wildpret y el director científico de Pirámides de Güímar, David Valcárcel, quienes fueron los encargados de dirigirse a los presentes, basícamente una amplia representación del sector turístico, museístico y cultural de la isla, además de la viuda de Thor Heyerdahl, la exactriz francesa, Jacqueline Beer, residente en Puerto de la Cruz.
Luisa Castro puso en valor la apuesta de Pirámides para el desarrollo turístico de Güímar y Carlos Alonso valoró la trayectoria de Fred Olsen como “empresario del transporte, porque gracias a él ha contribuido a la identidad canaria uniendo las Islas, además de contribuir activamente al desarrollo turístico y cultural con iniciativas como Pirámides de Güímar”.
Wilpret recordó “aquel 8 de julio de 1974 cuando llegó el primer ferry de Fred Olsen a Los Cristianos, como todo lo que ello significó para La Gomera”, añadiendo además que “Olsen ha sido capaz de sacar de la nada un jardín como Pirámides y debemos estarle agradecido por su apuesta por la investigación ”.
Fred Olsen, a quien nadie le pondría los 89 años que tiene, recordó a su amigo Thor Heyerdahl, al que conoció en 1941 y sorprendió a todos los presentes cuando mostró la máquina de escribir con la que redactó su primer libro Kon-Tiki en 1947.
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