política

“Si pierde el poder en 2019, Coalición Canaria se desintegrará”

Frente a la crisis crónica del Ayuntamiento de La Laguna, su figura brilla con el fulgor de los lustros acumulados ejerciendo como conciencia democrática en el área metropolitana tinerfeña
Santiago Pérez García, concejal y portavoz de Por Tenerife-Nueva Canarias en La Laguna. Andrés Gutiérrez
Santiago Pérez García, concejal y portavoz de Por Tenerife-Nueva Canarias en La Laguna. Andrés Gutiérrez
Santiago Pérez García, concejal y portavoz de Por Tenerife-Nueva Canarias en La Laguna. Andrés Gutiérrez

Frente a la crisis crónica del Ayuntamiento de La Laguna, su figura brilla con el fulgor de los lustros acumulados ejerciendo como conciencia democrática en el área metropolitana tinerfeña. Lejos de sucumbir a las poderosas campañas mediáticas que se han orquestado en su contra, la jubilación como profesor universitario sorprende a Santiago Pérez (La Laguna, 1954) enfrascado en su denuncia de la corrupción, ya sea con el caso Grúas o el caso Reparos. Sin su determinación, los gallos más mentirosos seguirían cantando que aquí no pasa nada, cuando pasa de todo. Con ustedes, el base del equipo, un líder, el playmaker.

-¿Qué le llevó al baloncesto?

“La tradición familiar. Mi tío Paco jugó en el Canarias, pero mi familia está ligada al equipo desde su fundación. Elfidio Alonso me contaba que iban por casa de mi abuela, doña Paca Llombet, y entre la casa de mi abuela y la de Elfidio se lavaban los equipajes del, digamos, Canarias primitivo”.

-¿Siempre de base?

“Sí. Empecé de mascota en el Canarias infantil, con 7 años, entrenado por Adrián, más conocido por el Moro. Luego llegó el minibasket y fui base del equipo del Nava-La Salle, mi colegio, durante tres años. Siendo infantil, pasé al Canarias juvenil, pero un año después me fichó el Náutico La Salle con un proyecto para ser campeones de España, lo que casi logramos”.

-¿No volvió al Canarias?

“Sí. Mi primer año de júnior jugué de titular en la fusión del Náutico La Salle con el Náutico Calasanz. Pero Pepe Cabrera me llamó, y el segundo año de júnior volví al Canarias, ya en el primer equipo y de titular. Fue el año en que trajeron al primer americano, Joby Wright, de la Universidad de Carolina del Norte. Casi subimos ese año. Tras mi primer año sénior, Hereñas, el entrenador del Náutico, que acababa de ascender a Primera, me dijo que contaba conmigo, pero no pudo ser”.

-¿Qué pasó?

“Era la temporada 75/76. Se dictó una orden de captura en mi contra por la actividad política. Tuve que irme precipitadamente de la Isla, y el baloncesto de competición se terminó”.

-El base construye el juego. ¿Paralelismos con la política?

“Todos. El baloncesto me enseñó a mí a jugar para el equipo, pero también a asumir mis responsabilidades. En mi primera temporada como base en el Náutico La Salle, yo jugaba para Richi Bethencourt, que era nuestro anotador, la estrella. Se lo llevó el Real Madrid, y en la segunda temporada fui yo el máximo anotador del equipo”.

-¿Me da un quinteto de políticos de la Autonomía canaria? El base lo pongo yo: usted.

“(Ríe a carcajadas) No me da con un quinteto, sería injusto”.

Santiago Pérez García, concejal y portavoz de Por Tenerife-Nueva Canarias en La Laguna. Andrés Gutiérrez
Santiago Pérez García, concejal y portavoz de Por Tenerife-Nueva Canarias en La Laguna. Andrés Gutiérrez

-Hágame la rotación entera, ocho o nueve jugadores que jueguen todos los partidos. Insisto en que el base está decidido…

“A ver… Román Rodríguez tiene que estar, y más con el papel que hoy juega en el Parlamento de Canarias, donde sobresale del resto…”.

-Se lo apunto como alero anotador, pero vamos a los pesos pesados, los pívots.

“(Vuelve a meditar). Jerónimo Saavedra y Adán Martín, que debe estar también”.

-Necesitamos un escolta…

“Necesitamos mujeres. Le doy dos nombres que pueden jugar en cualquier puesto: Patricia Hernández y Ana Oramas”.

-Remate la rotación…

“Es injusto para otros, pero también tienen que estar Tomás Padrón y Antonio Castro. De cerebro para todo, Fermín Delgado, sin discusión”.

-Hablando de rotación, usted ha sido senador, dirigió un hospital, diputado… ¿Se queda con el Ayuntamiento de La Laguna?

“Sí. Soy lagunero. Estoy orgulloso de haber sido concejal durante 18 años y no haber cobrado nunca del Ayuntamiento porque no he querido. Si hubiera querido, habría ganado mucho más al año que como profesor, trienios incluidos”.

-¿Cuánto más?

“(Nueva pausa, esta, de claro origen contable) Me habría dado para comprarme un Volkswagen Golf. Cada año, al contado. Entre 12.000 y 16.000 euros, más o menos”.

-¿No le agobia, como lagunero, que sea el Ayuntamiento fuente de noticias que empañan la imagen de la ciudad?

“Sí. En mi modesta hoja de servicios puedo estar orgulloso de, por ejemplo, ser fundador de la Asociación Cívica en Defensa de La Laguna. Esa asociación, creada en 1987, nació en respuesta al compromiso programático del entonces Gobierno municipal con la fusión del municipio con Santa Cruz”.

-¿Por qué esa querencia suya hacia la vida municipal?

“Quizás por raíces familiares. Hace ahora un siglo, un abuelo mío, Santiago Pérez Izquierdo, era concejal de Hacienda. Cuando empezaba su trayectoria política hubo un incidente muy serio porque un alcalde quería la fusión con Santa Cruz por la vía de los hechos, y se opuso”.

-¿Cómo vive la agonía del mandato actual, con el PSOE inmolado para mantener a CC, las investigaciones judiciales o casos como el de Zebenzuí?

“Quien nace lechón, muere cochino. Este gobierno municipal nació lechón, porque fue impuesto por razones ajenas a La Laguna y en contra del veredicto de las urnas, especialmente rotundo en favor de un cambio de rumbo”.

-¿Eso justifica esa censura que sigue sin concretarse?

“Es que la moción de censura fue el resultado de las urnas, porque el partido gobernante pasó de 13 a 7 concejales. Lo evitaron con una maniobra que cada vez parece más clara: tomaron como rehén al PSOE en el Gobierno de Canarias y, cuando tuvieron controlada La Laguna, lo echaron”.

-¿Cómo controla Coalición Canaria así al PSOE lagunero?

“Porque previamente lo vampirizó. Siempre lo ha intentado, y no solo en La Laguna, porque una vez casi lo consigue en Santa Cruz. Y hablo del PSOE por no hablar del PP, con el que ha pasado lo mismo en cuanto les han dado problemas alguien como Guillermo Guigou o, más recientemente, Cristina Tavío”.

Santiago Pérez García, concejal y portavoz de Por Tenerife-Nueva Canarias en La Laguna. Andrés Gutiérrez
Santiago Pérez García, concejal y portavoz de Por Tenerife-Nueva Canarias en La Laguna. Andrés Gutiérrez

-¿Relaciona esa subordinación del PSOE lagunero a su decadencia electoral, donde ya ni lidera su espectro político tras cuatro derrotas seguidas ante Podemos?

“Como sabe, he militado en ese partido durante casi toda mi carrera política, pero hoy me cuesta reconocer al PSOE en sus bandazos, sometido a un sistema de poder y renunciando a la esencia del socialismo democrático, que no es otro sino estar en el poder para transformar para mejor la sociedad”.

-¿Por qué Nueva Canarias?

“No estoy afiliado a Nueva Canarias, me presenté como independiente. Es verdad que estoy cómodo con NC, a pesar de que no estoy de acuerdo con ellos en algo fundamental: no soy nacionalista. Pero sí me identifico en muchas cosas más. Si se fija, me he presentado en coalición con NC tantas veces como lo ha hecho el PSOE: dos”.

-¿De dónde sale Por Tenerife?

“De un colectivo que se formó para luchar contra un plan de ordenación de La Laguna que impulsó Fernando Clavijo cuando era alcalde”.

-¿Se presentará en 2019?

“Un año antes de las elecciones de 2015 no pensaba presentarme. Ahora, un año antes de las de 2019, no lo he descartado”.

-¿Por qué no, ahora que se ha jubilado y tras tantos años?

“Por varias razones. La principal es el panorama del Ayuntamiento: tras tantos años en manos de ATI, es desolador. Por otra parte, las encuestas dicen lo que dicen, y eso lo sabe también CC. Y, por último, porque el colectivo que conforma Por Tenerife me ha planteado ya la posibilidad de repetir”.

-¿Se presentará para ser alcalde al fin?

“No. Si me presento es porque hay claras expectativas de un cambio político en La Laguna. Eso me ilusiona, pero no me mueve ser alcalde”.

-¿No se decía ya en 2015?

“Sí, y así se materializó en las urnas, donde fueron mayoría las fuerzas progresistas. Por eso entiendo que dicho cambio pasa por una candidatura unificada de las fuerzas progresistas”.

-¿Qué le parece la inminente imputación del alcalde?

“Soy partidario de la presunción de inocencia, y por el mero hecho de estar imputado no tiene necesariamente que dimitir. Pero los hechos tienen envergadura suficiente para asumir responsabilidades políticas”.

-Después de José Alberto Díaz, ¿espera que Clavijo sea imputado por el caso Grúas?

“El cortafuegos de Clavijo se ha venido abajo, ha caído la empalizada que pretendía proteger al director de orquesta del caso Grúas: Fernando Clavijo”.

-¿Por qué está molesto con la Fiscalía?

“Es que resulta imposible entender cómo el juzgado y la Fiscalía se han resistido a imputar al alcalde, y más cuando ya lo estaba Antonio Pérez Godiño, que llevaba camino de convertirse en un chivo expiatorio. No entiendo cómo la Fiscalía Anticorrupción no está ya en el caso Grúas, así que la oposición ha tenido que hacer su trabajo, que es el de controlar al poder”.

-Ha presentado la denuncia del caso Reparos. ¿Qué responde cuando le acusan de judicializar la política?

“Que es falso. Solo he acudido a la Justicia, especialmente a la penal, como último remedio. Y ha sido siempre de forma excepcional”.

-¿Alguna vez le han ofrecido algo para que desista de alguna denuncia?

“La gente sabe con quien se juega los cuartos. Saben cómo soy y saben cómo es mi familia. Antaño había un dicho según el cual si querías vender algo, vete a Santiago Pérez Izquierdo, el notario, porque así seguro que no te engañan”.

-¿Por qué no ha cambiado CC con el relevo generacional?

“Porque siguen defendiendo unos intereses que no son los generales, sino los de cierto empresariado que, a veces, incluso les da órdenes en público. CC se ha convertido en un mecanismo de poder con intereses propios. Por eso se juegan el ser o no ser en su continuidad en el poder”.

-¿Si no sigue en el poder, ve peligrar la existencia de CC?

“Desde luego. En cuanto salgan del Gobierno se romperán sus alianzas en islas como Fuerteventura, por citar alguna. Se desintegrará”.

-¿Ya no pesca?

“Aunque parezca mentira, cada vez menos. ¿Sabe por qué? Es que ahora me da pena. Y de ello es feliz responsable mi hija Laura”.

TE PUEDE INTERESAR