El futuro pasa por los jóvenes

No vivir de espaldas a los nuevos tiempos. La hoja de ruta en el seno de la ACB parece muy clara en su intención de crecer, de llegar a un mayor número de aficionados y, en ese objetivo, la misión está delimitada: los más jóvenes tienen que engancharse a la mejor competición de Europa. La asociación de clubes coincide plenamente en ese aspecto con el CB Canarias, con el que trabajarán de la mano para alcanzar sus metas.

En su reciente visita a la Isla, José Miguel Calleja, director general de la ACB, reconoció tener identificado el principal aspecto para crear una marca más fuerte: “Creo que lo tenemos claro: llegar a la gente joven. Ese es el principal reto y hay que construir todo a su alrededor. El baloncesto es un deporte masivo, muy seguido por los jóvenes a nivel de redes sociales, y ahora tenemos que lograr que se unan a la nueva corriente audiovisual pero, sobre todo, que vayan a los pabellones. La prioridad nuestra es cambiar el público objetivo”.

Las redes sociales pueden ser un instrumento clave para que vuelva “la pasión real” por el baloncesto como considera Calleja, aunque, para ello, hay también más medios.

La televisión

Mucho se ha criticado que los derechos televisivos estén gestionados por un operador de pago. Cuando los mismos estaban en manos de TVE se hablaba de que se cuidaba poco el producto, algo que parece haber mejorado pero, obviamente, llegando a menos espectadores.

“Por filosofía, por nuestras condición insular, claro que nos gustaría que se viera en abierto”, admite Félix Hernández, presidente del CB Canarias, pero “hoy por hoy” el actual operador ofrece más recursos económicos que cualquier otro: “La televisión es fundamental para el crecimiento de la liga, no solo por las personas a las que puedas llegar, sino también por la cuestión económica. Ver baloncesto en televisión cuesta 16 céntimos al día y es una opción de entretenimiento más. Creo que eso debemos tenerlo claro y no rasgarnos las vestiduras”.

Pero club y ACB entienden que tiene que ir más allá de la pista en sí, más allá de “ir cada 15 días al pabellón”, como reconoce Hernández. Para ello, la ACB quiere acercarse a los centros de estudio, poner las bases de futuros nuevos abonados y el CB Canarias es un ejemplo de que hay mucho trabajo por hacer en esa parcela, como admite su presidente: “De los 3.600 abonados que tenemos, casi 3.000 son adultos, por lo que ahora tenemos que conseguir que los jóvenes se enganchen”.

Pero, ¿podría lograr la Liga Endesa el nivel de importancia en redes sociales entre los jóvenes que tiene, por ejemplo, la NBA? No es la intención, aunque hay un plan claro.

“Sería un error querer trasladar algo de la NBA, que tiene muchísimas cosas buenas, pero no estamos en esa fase ahora mismo”, admite Calleja que, a la vez, cree que su tarea es “tan fácil como difícil”.

“Hay que llevar más el baloncesto a la calle. No es lo que queremos vender nosotros, sino qué quieren ellos y, al final, lo que hay que acercarles son historias y que ellos construyan su mundo alrededor de esas historias”, señala antes de añadir que luego “esas historias son compartidas en redes sociales” un terreno cuya llegada es casi infinita.

Ese relevo generacional, que incluso debe llegar a las directivas de las entidades, será tan importante que los propios jóvenes serán escuchados de manera directa y sus opiniones, preferencias y gustos moldearán un producto, el de la Liga Endesa, que debe estar preparado para competir dentro de una oferta de ocio como no ha habido antes igual.