Un informe técnico elaborado por encargo de la Fundación Canaria de la Construcción (Funcac) sobre el hotel Neptuno, de La Laguna, descarta la posibilidad de la rehabilitación de las edificaciones existentes y concluye con que la única alternativa viable es su reposición constructiva. “Es decir, se debe demoler un edificio obsoleto y sustituirlo por otro de nueva obra cumpliendo todos los requisitos técnicos y de diseño ahora recomendables y preceptivos”.
El estudio elaborado por un arquitecto urbanista llega a calificar de “ruina económica” la situación actual en la que se encuentra el antiguo establecimiento hotelero situado en la localidad de Bajamar. El informe recoge que la renovación supondría ejecutar obras para garantizar la habitabilidad y adecuación a los condicionantes constructivos con respecto al aislamiento, seguridad, medidas contraincendios, protección frente al ruido, ahorro de energía y salubridad. Todo ello precisaría de una inversión muy superior al 50% de su valor como obra nueva. A lo anterior se une que el hotel presenta problemas normativos relacionados con el PGO y la legislación turística, que concluirían con su declaración como fuera de ordenación por no adecuarse al planeamiento con respecto a altura máxima, retranqueo mínimo del lindero y la incompatibilidad de uso turístico. En estos momentos el inmueble, de más de 50 años de antigüedad, presenta un estado de abandono generalizado y problemas estructurales.