El Iberostar Tenerife mantuvo su imbatibilidad en la Basketball Champions League tras imponerse al Fribourg (91-68) en un encuentro controlado de principio a fin por los hombres de Txus Vidorreta. Todos sumaron en defensa, todos sumaron en ataque y solo en algún momento, lógico, de partido, los suizos lograron disponer de algún parcial anotador a su favor.
Los aurinegros se mostraron como un equipo sólido, capaz de asfixiar en defensa a su oponente o de matarlo en ataque si se le da la más mínima facilidad -o cuando se refugia en una insistente zona como ayer-, y que nunca deja de ser ambicioso. La fase de grupos tendrá pruebas difíciles, pero el Canarias parece superior a todos sus rivales y no solo sobre el papel, también cuando compite.
Fribourg salió bien a pista, sorprendiendo por su capacidad para anotar (5-8), pero al Iberostar Tenerife solo le hizo falta entrar en partido para dar la vuelta al marcador (13-8). El Canarias corrió más en ataque, aprovechó su mayor capacidad reboteadora y no desperdició las pérdidas de balón visitantes para llegar al final del primer cuarto con una primera ventaja de siete tantos (21-14).
Los insulares lograron su primera diferencia de diez puntos (28-18) cuando se habían jugado tres minutos de la segunda manga. La entrada en pista de Petit elevó el ritmo de ataque local además de intimidar en su zona con tapones y rebotes. El senegalés fue clave para que el Iberostar Tenerife lograra mantener, y ampliar, las diferencias, llegando al descanso con un cómodo 43-30.
La intención era la de salir igual de intenso tras el descanso, algo que se cumplió con creces. Un parcial de salida de 7-0 permitió al Canarias dispararse en el electrónico (50-30) obligando a los suizos a pedir un tiempo muerto que les era muy necesario. Surtió efecto gracias a un 0-9 (53-39), por lo que le tocaba el turno a Vidorreta, que pidió un respiro para los suyos.
Los insulares volvieron a apretar el acelerador, dejando casi sentenciado el duelo a falta del último cuarto (68-45). Solo un giro radical, en forma de casi milagro, podía provocar que la victoria no se quedara en casa.
Pero el último cuarto no tuvo historia. El Canarias aprovechó que el Fribourg insistió en su zona defensiva para disponer de posiciones muy cómodas para sentenciar, manteniéndose líder imbatido del grupo B (91-68) a la espera de jugar el próxima sábado, en Andorra, en Liga Endesa, un importante partido de cara a sus aspiraciones de estar en la Copa del Rey.
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