economÍa

“Granadilla liderará a medio plazo la reparación naval en el Atlántico Medio”

Pedro Suárez López de Vergara es el actual presidente de la Autoridad Portuaria de Tenerife. No obstante, su vinculación con el mar y los puertos tinerfeños le viene de lejos
Pedro Suárez, presidente de la Autoridad Portuaria de Tenerife
Pedro Suárez, presidente de la Autoridad Portuaria de Tenerife
Pedro Suárez, presidente de la Autoridad Portuaria de Tenerife. / DA

Pedro Suárez López de Vergara (Santa Cruz de Tenerife, 1959) es el actual presidente de la Autoridad Portuaria de Tenerife. No obstante, su vinculación con el mar y los puertos tinerfeños le viene de lejos. Su padre y uno de sus tíos organizaron los servicios médicos portuarios muchos años atrás y, desde entonces el mar y el amor por la náutica fueron una constante. En su caso, la vela como práctica deportiva, que no ha abandonado, le llevó a ser durante varios años comodoro del Real Club Náutico. “Desde muy niño, el puerto de Santa Cruz ha sido una parte de mi vida, acabas por enamorarte de este espacio impresionante, en el que pasan tantas cosas, y te enganchas. Así que para mí es un privilegio poder trabajar en la Autoridad Portuaria, algo que ni me hubiera imaginado cuando venía aquí con mi padre. Estoy muy agradecido de poder colaborar con esta gran organización”, asegura.

Diplomado en Empresariales por La Laguna, con un máster en Marketing Operacional por la ESMA de Barcelona, cursó, además, el programa de Alta Dirección del Instituto Internacional Bravo Murillo. Profesionalmente ha estado vinculado a diversas empresas con sede en las Islas; y en los últimos años, a la Mutua de Accidentes de Canarias (MAC), en la que ha ocupado varios puestos directivos.

-Hace apenas medio año que es usted presidente de la Autoridad Portuaria de Tenerife. Después de este período, ¿qué carencias diría que se ha encontrado?

“En este momento, si tuviera que decir algo de lo que me gustaría disponer ya, es de más espacio. La actividad de los puertos de la provincia se ha venido incrementando de forma sostenida. Un gran número de empresas e inversores canarios, del resto del Estado e internacionales, muestran mucho interés por establecer sus industrias y negocios aquí y no debemos dejar pasar esta oportunidad, porque supone crecimiento y también es empleo para nuestra isla. De hecho, para algunas actividades, como se ha visto recientemente, hay bastante competencia. No obstante, para ser justo, yo no hablaría de carencias, sino de retos y proyectos que materializar, y Granadilla será, en breve, la respuesta a muchos de ellos. Esta nueva dársena, con unos 1.000 metros de muelle, 800.000 metros cuadrados de superficie y su Zona Franca, nos va a dar posibilidad de atraer toda esta iniciativa privada y dotarla de lo necesario para que se establezca y se quede. Queremos que los puertos tinerfeños sean el referente en el Atlántico Medio en modernidad, eficiencia y sostenibilidad ambiental”.

-¿Qué piensa de los que todavía siguen oponiéndose en Tenerife a los muelles en Granadilla por su impacto ambiental?

“Pues que respeto totalmente sus opiniones, porque tienen parte de razón en que toda infraestructura ocasiona un impacto, desde un edificio, hasta un aeropuerto, las carreteras, el tranvía o un puerto. Pero gracias al cuidado que se ha puesto en Granadilla, con su Observatorio Ambiental -integrado por un gran plantel de expertos- tengo el convencimiento de que es la infraestructura canaria en la que más se ha cuidado este aspecto. Créame si le digo que nuestro equipo trabaja con la idea de que todos nuestros puertos sean considerados modélicos como puertos inteligentes y verdes”.

-Al hablar de puertos siempre sale a relucir que son “infraestructuras estratégicas”, ¿qué se quiere decir con esto?

“Por los muelles entran y en ellos se acopian todos los productos y bienes de primera necesidad para la vida y la economía en las islas: el combustible; diversos graneles, como cereales; mercancías para alimentación y bebidas; materiales para construcción, como el clínker; vehículos de todo tipo… Todo esto se descarga y despacha a través de nosotros. Si hubiera una palabra que significara más que estratégico, yo la usaría aquí. Lo que nos suele pasar es que muchas veces, cuando compramos cualquier producto, lo normal es que no nos paremos a pensar cómo ha llegado a la estantería del supermercado o a la tienda de muebles, por ejemplo. Pues es posible gracias a los puertos y la comunidad profesional que trabaja en ellos: desde los consignatarios, los prácticos, amarradores, a los estibadores, pasando por los departamentos comerciales o los encargados de la seguridad, entre otros muchos. Un gran colectivo que hace funcionar una maquinaria que debe estar siempre bien engrasada. Y no es fácil. He de decir que, en mi caso, he tenido unos magníficos ejemplos a seguir, que son los presidentes que me han precedido”.

-Y en todo este maremágnum de empresas, trabajadores, servicios públicos, ¿cuál es su papel?

“Como yo lo veo, mi papel es armonizar la realidad actual de los puertos con lo que deberían ser en el futuro. Me gustaría colaborar en impulsar esa evolución imprescindible que necesitan nuestras islas, a través de lo que podemos ofrecerles. La presidencia de Puertos de Tenerife, junto con sus órganos de gobierno (en los que están representadas todas las instituciones relevantes de la Provincia) tiene como misión coordinar toda esta gestión. Así, si tuviera que resumir en tres ideas lo que hace la Autoridad Portuaria, diría que el trabajo consiste en coordinar, planificar y aunar todas las voluntades en la misma dirección: el progreso y el bienestar de los habitantes de todas y cada una de las islas de nuestra provincia. Hacemos muchas cosas para cumplir con esta función y tengo que decir que sería imposible sin el trabajo de un gran equipo, en el que destaca el director de Puertos, Luis Santana, junto a todos los jefes y coordinadores y sus unidades. Nosotros no nos gobernamos solos, formamos parte de una organización en la que los cabildos, los ayuntamientos, la Comunidad Autónoma, el Estado y la Unión Europea tienen mucho que decir. Además, las 28 autoridades portuarias españolas dependemos de Puertos del Estado, que pertenece al Ministerio de Fomento. Todo es un gran sistema que hace de España la plataforma logística del sur de Europa”.

-Hemos visto esta semana cómo una de las empresas de reparaciones navales está reclamando más espacio para desarrollar su actividad.

“Sí, y es una buena noticia. En estos momentos estamos en un período de negociación con ellos y otras empresas que se dedican al subsector de las reparaciones navales para que la actividad siga creciendo. Hay mucho margen para ello. Me parece normal que presionen y hagan valer sus planteamientos, aunque a mí, personalmente, me parece que la mejor manera es en la mesa de la Autoridad Portuaria, que es su casa. Piense que antes de 2014 era una reivindicación histórica la recuperación de esta actividad de reparaciones después del cierre del antiguo astillero. En tres años desde su apertura se multiplicó el número de empresas y los empleos industriales. Hoy en día, muchas personas trabajan gracias a este compromiso. Actualmente, la importante actividad de reparación naval se desarrolla en la dársena del Este, conviviendo con actividades estratégicas como la descarga de combustible o graneles. Pues bien, se ha proyectado instalar un nuevo dique flotante que necesitaría de mayor espacio del disponible. Nuestra labor será buscar una solución que permita la convivencia de esta actividad de máxima importancia junto a otras de las que, bajo ningún concepto, podemos prescindir, como los suministros estratégicos que están instalados en esa dársena. Estamos en la búsqueda de una solución transitoria, pero hay dificultades técnicas que vencer y no siempre se puede conseguir el cien por cien de lo que se quiere”.

-¿Y Granadilla para las reparaciones?

Claro, esa es la solución definitiva a medio plazo. Cuando le hablo de falta de espacio, me refiero a que las dimensiones del puerto de Santa Cruz de Tenerife son las que son. Por eso, la Autoridad Portuaria ha trabajado durante décadas para dotar a la isla de la dársena de Granadilla que, como se ha demostrado, es totalmente imprescindible. Se habla mucho de diversificar la economía y sacarla del monocultivo del turismo para que se siga creando empleo para los tinerfeños y que éste sea de calidad, pues bien, Granadilla es una infraestructura que va a colaborar en hacerlo más posible. En este caso de las reparaciones navales, cuando se cumpla con todos los trámites, como por ejemplo, los concursos públicos o los estudios ambientales preceptivos, Granadilla contará con un espacio magnífico para reparaciones navales, que multiplicará por mucho las capacidades de nuestros puertos en este ámbito y nos llevará a liderar este sector en el Atlántico Medio, no le quepa duda. Mejorará la disponibilidad de atraques de larga estancia, con lo que eso significa económicamente para la isla: no sólo los costes de amarre y mantenimiento, sino los trasbordos de tripulación, el mantenimiento, lo que es también crecimiento y nuevos puestos de trabajo en los sectores del transporte, la hostelería o los suministros industriales. Las grandes navieras que ven a Tenerife como lugar para sus reparaciones navales, no sólo no están pensando en irse a otros lugares, sino que están en conversaciones con nosotros para ver cómo pueden afianzar su presencia aquí. Pero como en toda negociación hay que pedir discreción y tranquilidad, porque a nadie le gusta el ruido cuando aún no se ha decidido nada. Va en interés de todos”.

-¿Cómo resumiría las líneas principales de trabajo en su gestión?

“Hay cinco grandes líneas de gestión: convertir Granadilla en un hub o nodo de transporte para que se produzcan en él cargas y descargas de mercancías en tránsito por el Atlántico, fomentar las conexiones puerto-ciudad en todas las capitales de la provincia pivotando esto en el turismo de cruceros, atraer toda la industria de la que seamos capaces a la Zona Franca de Tenerife para dar valor añadido a nuestras importaciones y afianzar la industria de las reparaciones navales y los atraques de media y larga estancia. Me gustaría avanzar lo máximo posible en estas áreas. Igual es ambicioso, pero me encanta este trabajo.

-¿Y cuáles son las inquietudes de futuro?

“Fonsalía, sin duda. Es un puerto estratégico para la conexión intermodal con La Palma, La Gomera y el Hierro. Cuando esté funcionando reducirá muchísimo los perjuicios de la doble insularidad. Nos alineamos con todas las administraciones, que están de acuerdo en sacarlo adelante, porque realmente es una solución a Los Cristianos y a la necesidad de cerrar el anillo marítimo de la Provincia con un sistema de puertos propio de una región europea del siglo XXI”.

TE PUEDE INTERESAR