El tribunal de jurado popular del juicio celebrado durante esta semana en la Sección Segunda de la Audiencia Provincial de Las Palmas contra Sira M. Q. N. ha considerado culpable a la mujer de los delitos de asesinato, estafa y apropiación indebida por matar a su novio a puñaladas, tras lo cual guardó el cuerpo sin vida en un bidón y, finalmente, lo tiró al mar en aguas de la capital grancanaria.
Asimismo, durante la lectura del veredicto, dicho jurado declaró como no culpable a una amiga de la acusada, al no considerarse probado que se ofreciera a deshacerse del cuerpo ni que ambas empujaran el bidón a plena luz del día por la zona de El Confital de Las Palmas de Gran Canaria, para más tarde tirarlo al mar cuando ya había anochecido.
Respecto a los hechos que sí se consideran ahora probados, cabe reseñar que la acusada y su víctima, un varón llamado Daniel, iniciaron una relación y empezaron a vivir juntos en enero de 2015 en la casa de la madre del posteriormente asesinado, trasladándose luego a otra vivienda en Telde, esta de alquiler. Desde un primer momento, la mujer ocultó datos sobre su persona, llegando incluso a presentar a un hijo resultante de una relación anterior como si se tratase de un sobrino.
En un momento dado, la acusada percibió que el hombre quería dejar la relación, momento en el que se inventó que estaba embarazada de gemelos, noticia que compartieron con amigos y familiares.
Por otro lado, la mujer puso a la venta en febrero de 2016 un vehículo propiedad de su pareja por Internet, sin que mediara la autorización del hombre. Para la transacción económica, que tuvo lugar finalmente el 2 de marzo de ese mismo año, utilizó el DNI del varón, quien procedió más tarde a denunciar la sustracción de su vehículo al desconocer lo ocurrido.
Esta denuncia, junto a que se acercaba la supuesta fecha del parto del falso embarazo, hizo que Sira decidiera acabar con la vida del hombre para que no descubriera sus mentiras.
Así, entre el 26 de febrero y el 4 de marzo de 2016, en el domicilio de Telde en el que ambos vivían, Sira atacó por la espalda a su novio con un objeto punzante, asestándole varias puñaladas y produciéndose un forcejeo en el que el hombre intentó defenderse, aunque acabó sucumbiendo ante el ataque de su entonces pareja sentimental.
Una vez que asesinó a su novio, la mujer hizo creer a los padres y familiares de la víctima que había dado a luz el 28 de febrero a sus gemelos, pero que habían tenido que desplazarse a Madrid para ser tratados en un hospital de referencia, llegando incluso a suplantar por
WhatsApp a Daniel en un chat familiar durante meses.
La situación preocupaba, especialmente, a la madre de la víctima, desesperada por sus baldíos intentos diarios de hablar con su hijo. La familia llegó incluso a ingresar dinero en dos cuentas corrientes durante los meses en los que supuestamente estaban en Madrid, hasta un total de 415 euros.
Finalmente, el cuerpo del hombre fue hallado por un vecino el 13 de mayo en la costa de El Confital, a escasos metros de donde fue supuestamente arrojado, y Sira fue arrestada poco después en Asturias.
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