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El Tenerife enchufa de nuevo la ilusión tras ganar en Lugo (1-4)

Los blanquiazules quieren sacar un buen resultado de la visita al Anxo Carro
El capitán Suso Santana, eufórico tras el último triunfo del CD Tenerife ante la UD Las Palmas el pasado 4 de mayo en el estadio Heliodoro Rodríguez López. /Sergio Méndez

Álex Bermejo y Malbasic marcan a pares en otra exhibición foránea de los blanquiazules

Tras el apagón total que provocó el Fuenlabrada, el Tenerife enchufó de nuevo la ilusión con otra exhibición foránea, en la que marcaron a pares Álex Bermejo y Filip Malbasic. El extremo y el delantero destrozaron a un Lugo que solo pudo meterse en el partido durante el último cuarto de hora de la primera parte.

López Garai hizo los cambios previstos en su once inicial. Regresaron Luis Pérez, Carlos Ruiz, Isma López y Bermejo, mientras que se mantuvo en la formación inicial Alberto. El sacrificado en la medular fue Luis Milla, que comenzó el partido sentado en el banquillo. De esta manera, es la primera vez que el técnico vasco prescinde de su habitual trivote.
El Lugo empezó el partido con dudas y las aprovechó el Tenerife. Desde el primer minuto, los blanquiazules acosaron al cuadro gallego, que sucumbió al juego blanquiazul a los diez minutos de martido. Álex Bermejo probó al portero con un disparo lejano y se encontró con el error mayúsculo de Varo, que en su intento de despejar, alojó el esférico en su portería.
Diez minutos más tarde, el Tenerife trianguló como los ángeles para que Álex Muñoz acabase asistiendo a Malbasic, quien solo tuvo que buscar el hueco perfecto para de nuevo meter el balón en la meta gallega. Era el 0-2 y se confirma que, de momento, la versión visitante de los blanquiazules es mucho mejor que la local.
Así el Tenerife completó una primera media hora de partido casi perfecta, pero un error en la marca de Álex Muñoz, que agarró de la camiseta en una pugna a Manu Barreiro, originó el penalti que metía en el partido al Lugo. El mismo Barreiro engañó a Ortolá para transformarlo.

A partir de ese momento, al Tenerife le surgieron las mismas dudas que tuvo el Lugo en el arranque del encuentro. Lo empezó a pasar mal el cuadro visitante, que a punto estuvo de irse a la caseta con en el empate en el marcador. Lo impidió el VAR. El colegiado de la contienda tuvo que acudir a él para ver unas manos de Seoane tras un disparo de Carlos Pita. Una acción que había acabado en el gol que suponía el empate a dos. Con esta jugada se llegó al final de la primera parte, en la que el Tenerife acabó sufriendo por no saber retener la pelota.

La segunda parte fue un calco de la primera. El Tenerife salió en tromba y muy pronto se encontró con la jugada que derribó las resistencias galegas.
Tal y como acabó el primer acto, en el arranque del segundo, el VAR hizo acto de presencia para revisar un penalti cometido por Manu Barreiro, del Lugo, con una mano dentro del área. Filip Malbasic convirtió la pena máxima en el minuto 52 gracias a un remate con la derecha por bajo, junto al palo izquierdo. Se repetía el guión: los visitantes cobraban ventaja muy pronto ante un Lugo que era incapaz de parar a los de López Garai.
Peor se le pusieron las cosas a los locales cuando, en el minuto 60, Álex Bermejo culminó una jugada de tiki-taka extraordinaria. El extremo, que está de dulce, remató con la derecha desde el centro del área, la asistencia de un Filip Malbasic que derrochó calidad sobre el campo lucense. Mención aparte merece Borja Lasso, quien dejó pasar la pelota con maestría al observar la incorporación del ex jugador del Espanyol.
Con el 1-4 en el marcador, el equipo de Eloy Jiménez intentó a desesperada acortar distancias, mientras que López Garai se dedicó a conceder refresco a los titulares. Salieron del campo Malbasic, Lasso y Miérez, mientras que entraron Suso, Luis Milla y Dani Gómez.
Los ataques de los albivermellos quedaron en nada porque siempre se tropezaron con un muro llamado Ortolá. El portero realizó paradas de enorme mérito, como la que le hizo a Manu Barreiro en el minuto 88. El exportero del Barcelona demostró unos enormes reflejos al disparo a bocajarro del punta del Lugo.
Así el Tenerife logró la segunda victoria como visitante y ahora afronta un doble compromiso ante su afición en el Heliodoro Rodríguez López.

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