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El Gobierno canario vela armas para el inicio del curso escolar

El Ejecutivo autonómico prevé tomar hoy una decisión sobre el comienzo de las clases presenciales en las islas de mayor incidencia de la COVID-19 y la realización de cribados
La consejera Manuela Armas, en la Comisión de Educación, Universidades, Cultura y Deportes del Parlamento de Canarias. Fran Pallero
La consejera Manuela Armas, en la Comisión de Educación, Universidades, Cultura y Deportes del Parlamento de Canarias. Fran Pallero
La consejera Manuela Armas, en la Comisión de Educación, Universidades, Cultura y Deportes del Parlamento de Canarias. Fran Pallero

Manuela Armas recalcó ayer que la decisión sobre el inicio de las clases de forma presencial en Lanzarote, Gran Canaria y El Hierro, donde la incidencia de la pandemia es mayor, se toma hoy en el Consejo de Gobierno, una vez escuchado al comité de emergencia sanitaria, que se reunió este miércoles. También está por confirmar si se mantiene la fecha genérica del martes 15 y se acordará si se hacen pruebas de cribado a los miembros de los colectivos educativa. Al respecto, negó que la experiencia de la Comunidad de Madrid haya sido “fantástica”. Toda la logística se diseñará cuando el comienzo del curso esté “lo más próximo”.

La Consejería de Educación, Universidades, Cultura y Deportes contratará a 51 orientadores y 50 educadores sociales para el próximo curso. Lo anunció Armas en la comisión parlamentaria. La contratación del segundo grupo se realizará en el marco del Programa de Cooperación Territorial para la Orientación, el Avance y el Enriquecimiento Educativo (#PROA+).

De los 51 orientadores, cuatro formarán parte de los dos equipos provinciales de atención y asesoramiento a familias, profesorado y alumnado con trastornos graves de las emociones y la conducta que este departamento autonómico ha creado con el objetivo de garantizar una respuesta inclusiva al estudiantado del Archipiélago.

“En los últimos años”, expuso la consejera, “se viene observando un incremento de alumnado que padece alteraciones emocionales y del comportamiento, y la respuesta educativa dada hasta ahora es insuficiente, de ahí esta iniciativa de Educación que parte del estudio realizado desde la Dirección General de Ordenación, Innovación y Calidad educativa”.

La creación de estos dos equipos “responde al requerimiento de contar con un apoyo especializado para el alumnado, las familias y el profesorado”.

Armas recordó que Canarias contará, además, con 21 nuevas Aulas Enclave (que se suman a las 180 actuales) para atender la demanda del alumnado que precisa de esta modalidad de escolarización, y que se han iniciado los trámites para la creación de un nuevo centro de educación especial en San Bartolomé de Tirajana y de un aulario adscrito al Centros de Educación Especial Adeje. Actualmente, hay en las Islas 11 Centros de Educación Especial.

Con el fin de atender la realidad de los trastornos del espectro autista (un caso por cada 100 nacimientos), se continuará con el pilotaje de centros. La implementación de este programa se traduce en atención específica al alumnado con TEA, en un incremento de especialistas (profesorado de Necesidades Específicas de Apoyo Educativo, de Audición y Lenguaje, así como de cuidadores), en la formación y el asesoramiento al profesorado, y en la participación de todos los agentes educativos implicados (Equipo de Orientación Educativa y Psicopedagógicos específico de TEA y de zona, profesorado y familias). “La formación del profesorado en este ámbito educativo continuará siendo un objetivo”, resaltó Armas.

En respuesta a una pregunta de Ciudadanos, la consejera informó de que esta semana se abonará a cada centro educativo una partida de 1.500 euros para que compren material que ayude a prevenir el coronavirus, como mascarillas, guantes y geles hidroalcohólicos. Muchos centros ya han adquirido material, dado que disponían de remanentes del último semestre tras la suspensión de los gastos de comedor en marzo.

En relación a la ausencia de personal de enfermería en los colegios e institutos, la consejera de Educación lo justificó en que “no hay” en el mercado, porque es muy cotizado durante la pandemia. No obstante, se comprometió a impulsar el proyecto de enfermero escolar cuando concluya la crisis sanitaria.

La portavoz de Cs, Vidina Espino, manifestó que la “preocupación” por el inicio del curso entre las familias y las comunidades educativas no ha cesado, pese a que el Ejecutivo regional ya presentó su protocolo de actuación. Por ello, la diputada reclamó que se hagan pruebas de cribado: “La prudencia es buena, pero puede que no estemos preparados. Para bajar el número de alumnos por clase es preciso contratar profesores, pero los 3.200 anunciados en julio, no los 2.500 que se van a incorporar después que el consejero de Hacienda [Román Rodríguez] dijera que no había dinero para tanto”. Por eso, la animó a “pelear por los 700 si de verdad quiere reducir el riesgo de contagio”.

Espino aseveró que no todos los colegios “están en las mismas condiciones, pues no es igual un barracón sin ventilar que aulas de 70 metros cuadrados”.

Jana González (CC-PNC-AHI) censuró el retraso en el envío del material de protección a los docentes que se incorporaron al trabajo el 1 de septiembre.

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