
Un cartel que apareció el lunes en los aparcamientos de la calle Antonio José Melo y Novo, en el barrio de César Casariego del distrito Ofra Costa-Sur, está causando malestar entre los vecinos de la zona. La señal prohíbe aparcar en días lectivos, desde las 7:00 hasta las 9:00, y desde las 13:00 hasta las 15:00 horas con el fin de que allí estacione la guagua de un instituto lagunero. “¿Y ahora dónde aparcamos?”, decían ayer a DIARIO DE AVISOS vecinos de este barrio capitalino donde, según denuncian, las plazas de estacionamiento ya eran escasas.
Una de esas vecinas es Sandra Arteaga, quien califica de “despropósito” la eliminación de 20 de las 32 plazas de estacionamiento que había en la zona. Esta situación, apunta, es problemática para la cantidad de vecinos mayores y sus familias, así como para ella misma dada la “inseguridad” que existe en el barrio.
“Si vengo por la noche tengo que dejar el coche lejos y caminar sola hasta casa para al día siguiente no tener que levantarme antes de las 7:00 de la mañana a cambiarlo. Aquí se han dado robos y así no hay quien camine tranquila”, comenta indignada.
En el entorno de la calle Antonio José Melo y Novo se encuentran varios edificios de 16, 13 y 8 plantas. Allí residen más de 200 vecinos, pero “solo hay, como mucho, 50 plazas de aparcamiento”, denuncia.
El colapso en este punto de César Casariego es de tal magnitud que Arteaga explica que es frecuente ver vehículos estacionados sobre las aceras o en zonas donde está prohibido aparcar, “y claro, luego vienen a poner las multas”.
Otra de las vecinas afectadas es Odile Carracedo, quien ha creado una petición en la web Change.org en la que solicita “que devuelvan el aparcamiento de Antonio José Melo y Novo a los vecinos”. Hasta ahora, la petición ha reunido 25 firmas en 24 horas.
Carracedo cuenta que, hace ya varios años, ella y su hermano solicitaron la reserva de una plaza de aparcamiento para su padre, que tiene una discapacidad física. Sin embargo, asegura que le fue denegada: “Alegaron que no había suficiente espacio en la zona, por eso ahora nos extraña que se eliminen más de 20 plazas de un plumazo”.
CUESTIÓN DE SEGURIDAD
Los alumnos del IES Padre Anchieta, un instituto del barrio lagunero de Taco, fueron desplazados al Colegio Ofra-Santa Clara, en Santa Cruz, hace varios años, debido al mal estado que presentaba la edificación en la que acudían a sus clases.
Según fuentes del Ayuntamiento capitalino, la cesión de aparcamientos para la guagua se realiza tras una petición del propio instituto, así como del Gobierno de Canarias, y por motivos de “seguridad”. Cabe señalar que en septiembre de 2020, un menor de 15 años resultó herido de gravedad al ser atropellado cerca del centro.
En relación al malestar que el cambio en el uso de los aparcamientos ha generado, el Consistorio ha confirmado tanto a los afectados como a este periódico que planea “reordenar para recuperar las plazas de aparcamiento en otros puntos”.
Sin embargo, las alternativas propuestas no convencen por ahora a los residentes del barrio: “Queremos que nos devuelvan el aparcamiento, no que nos habiliten espacios más lejos de casa”, aseveró Arteaga.
Esta vecina afirma que “justo encima del instituto hay un terreno donde puede aparcar con seguridad la guagua” y desconfía en la búsqueda de alternativas por parte del Ayuntamiento: “Llevan ya años buscando opciones y ahora encima nos dicen que la decisión del terreno depende de Urbanismo”.
Ante todo esto, los vecinos advierten que si es necesario, harán una sentada o una manifestación en coche, pero “de brazos cruzados no nos vamos a quedar”.