El presidente del Gobierno de Canarias, Ángel Víctor Torres, ha señalado este viernes que es “muy probable” que la isla de Tenerife si continúa con la mejora en sus datos de incidencia del coronavirus baje a nivel 2 este fin de semana, mientras que Gran Canaria avisó de que si sigue empeorando podría subir al nivel 3.
Torres ha querido dejar claro que la adopción de medidas y de subir o bajar una isla de nivel de incidencia por Covid-19 se adopta “siempre” atendiendo a los dictámenes del comité científico de expertos que asesora al Gobierno regional y de Salud Pública del Ejecutivo canario.
De este modo, dijo en declaraciones a los periodistas, el Consejo de Gobierno del Ejecutivo canario del jueves decidió que la isla de La Gomera que estaban en nivel 2 pasara al 1 porque había mejorado, mientras que La Palma y El Hierro se mantuvieran en nivel 1; Fuerteventura que estaba en nivel 1, ha tenido aumento de contagios, y pasara a nivel 2; y Lanzarote que estaba en nivel 2, que ha tenido un aumento, pasara a nivel 3.
En cuanto a Tenerife matizó que se observa una evolución, tras adoptarse “medidas, las más dura, de nivel 3 casi 4”, donde se ha visto una “mejora paulatina”, por lo que apuntó que se optó por mantener el nivel 3 pero “es muy probable que pase a un nivel 2 ampliado”, que entraría en vigor la noche del domingo al lunes.
Respecto al caso de Gran Canaria puntualizó que la decisión de si sube de nivel o se mantiene en el que se encuentra se ha aplazado para este sábado porque es cuando se cumple una semana de su entrada en el nivel 2, por lo que debido a que han sido “pocos los días en ese nivel 2, mañana sábado se actualizarán los informes”, de tal forma que señaló que “si la tendencia es que sigue empeorando mañana, es posible que se decida que del domingo al lunes puede pasar a nivel 3”.
Torres ha incidido también en que las medidas “están tasadas” atendido al nivel en el que se encuentre cada territorio, de tal forma que recordó que un nivel 3 supone una “afección en los aforos” de interiores de restaurantes, de centros comerciales o de centros deportivos, así como en los toques de queda. Añadió que todo ello se estipula, además, en relación a los datos de UCI, incidencia acumulada o incidencia en franjas de edades, entre otras.
Por otro lado, apuntó que volver a un confinamiento en 15 días implicaría estar “mejor” sanitariamente pero la situación económica “en quiebra”, por lo que abogó por “buscar un equilibrio entre salud y normalidad porque la Covid no se va a ir porque se tengan vacunas”, afirmando que “hay que convivir con la pandemia, hay que convivir durante meses”.
De todas formas, dijo que en Canarias las cosas se están “haciendo bien” en relación a los indicadores de otras autonomías, aún así admitió que “hay que mejorar” los datos. También afirmó que “era evidente que los 20 días de la Navidad eran arriesgados” porque hay vacaciones escolares, mayor contacto entre las familias o más tiempo de esparcimiento, entre otros.
Si bien, consideró que con el ritmo de la vacunación las cosas tienen que “ir y deben ir a mejor”, para agregar que la mayoría de la población canaria “se ha portado responsablemente” en las fiestas de Navidad.