El expresidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, ha solicitado este jueves un gran pacto de Estado en migraciones que para Canarias sería un “salto cualititativo” dado que África “tiene las condiciones que tiene” y las islas y España son el “sitio de entrada” a Europa.
“En democracia hay que decir las cosas como son, es importante decir la verdad y que la gente lo pueda entender”, ha señalado en una conferencia pronunciada en el Parlamento de Canarias con motivo del foro ’23F. Cuarenta años del intento de golpe de Estado en España y retos para la democracia actual’, en el ha admitido que el reto al que se enfrenta el Estado es “dificilísimo”.
En esa línea, ha apuntado que “es una política de gran exigencia” que se ha complicado con la pandemia porque la comunicación y las devoluciones a los países de origen es “más difícil”, de ahí que haya pedido “comprensión” para el Ejecutivo central.
Según Zapatero, que vivió en primera persona una crisis migratoria “muy fuerte” en 2006, el Gobierno “tiene toda la sensibilidad” para resolver los problemas del archipiélago y la secretaria de Estado de Migraciones, Hana Jalloul, “está 24 horas pensando en Canarias”.
Además, propone que este pacto de Estado debería abrirse incluso a formaciones políticas “con tendencia a la xenofobia”, caso de Vox, aunque cree que no lo suscribiría.
En su opinión, la xenofobia y el racismo representan “lo peor de la condición humana” y cuando se practican, “la humanidad retrocede años” porque supone una “negación de la razón y la explotación del miedo”, y quienes lo practican dejan de ser seres humanos para convertirse en “rastreros”.
Zapatero, quien se ha reivindicado como un “combatiente activo” contra el racismo y la xenofobia, ha señalado que el pacto de Estado debe pasar por una revisión de la legislación en extranjería, un compromiso institucional de dedicar más recursos al sistema de acogida, orientar más la política exterior a la inmigración y arrancar “más capacidad de compromiso” de la UE, algo que “está pendiente”.