

Un total de 751 personas han visitado la Cueva del Viento, en Icod de los Vinos, desde el pasado 20 de febrero, fecha en la que la instalación del Cabildo de Tenerife abrió de nuevo las puertas tras el parón causado por la pandemia. Durante el primer mes tras la reapertura, se ofertaron 76 rutas en cuatro idiomas a grupos reducidos bajo unos estrictos protocolos sanitarios.
Así lo anunció la consejera insular de Educación, Juventud, Museos y Deportes, Concepción Rivero, quien explicó que de estas rutas “44 se han realizado en español, con un total de 470 participantes; seis en inglés, con 121 personas; 10 en alemán, en las que han participado 94 personas, y 16 en francés, que han contado con la presencia de 66 personas”.
“Nos hemos adaptado a las circunstancias para que nuestros visitantes puedan recorrer la cueva de una forma segura, con aforo limitado y con mascarilla obligatoria, y también aprovechamos el periodo de cierre para realizar actuaciones de mejora, como la reforma integral del Centro de Visitantes Cueva del Viento y trabajos de seguridad en la gruta y los derivados de la preparación de los protocolos antiCOVID”, señaló la consejera.
La Cueva del Viento es un tubo volcánico único debido a que sus galerías se extienden en tres niveles superpuestos, cuenta con numerosas ramificaciones aún sin explorar y presenta una gran variedad de estructuras de origen primario, como estalactitas de lava, cascadas lávicas, terrazas laterales o lagos de lava. A su belleza física se une un alto valor ecológico, científico y arqueológico.