
La Asamblea General de la cooperativa La Prosperidad aprobó el pasado viernes el anteproyecto de creación de un surtidor de combustible de bajo coste en Tijarafe, como respuesta a los elevados precios que, desde hace meses, sufren las denominadas Islas Verdes: La Palma, La Gomera y El Hierro. Una propuesta que fue adelantada en el mes de abril por DIARIO DE AVISOS, y en la que comenzará a trabajar desde ahora la entidad que lidera Víctor Manuel Rodríguez, estableciendo contactos con las administraciones públicas pertinentes para elaborar un proyecto firme que poner en marcha.
Según ha podido saber este periódico, la cooperativa tijarafera se encuentra inmersa en las labores de redacción de la iniciativa, si bien desde la propia organización se manifiestan cautos con respecto a los plazos que se manejan. De acuerdo con las fuentes consultadas, en el transcurso de la reunión se planteó que la instalación del dispositivo requerirá de distintos permisos del Cabildo y el Ayuntamiento; unos trámites que se iniciarán esta misma semana, pero para cuya finalización aún no cuentan con estimaciones.
Cabe recordar que el surtidor, tal y como está ideado en la actualidad -a falta de conocer la versión definitiva, que se plasmará en el proyecto-, estará disponible las 24 horas del día los siete días de la semana y tendrá carácter automático. Es decir, que el conductor podrá repostar haciendo uso de la propia máquina, donde además, será posible el pago con tarjeta de débito o crédito. Una tecnología que, hasta la fecha, no existe en ninguna gasolinera de la Isla, y que aportaría un toque innovador a la propuesta.
Tras la publicación del DIARIO, los grupos políticos representados en el Ayuntamiento declararon sentirse orgullosos de que sea una cooperativa de Tijarafe la que abandere este proyecto. Sin embargo, también se mostraron cautos ante la viabilidad que, a nivel técnico, podía tener, visto el entramado administrativo al que deberán hacer frente.
En este sentido, una de las vías para agilizar la autorización del surtidor es la planteada por el consejero insular de Ordenación del Territorio, el socialista Gonzalo Pascual, quien a principios de marzo aseguraba que desde su departamento estaban trabajando para “lograr el acceso de nuevos operadores a la Isla”, con el objetivo de “favorecer la competencia en el mercado de la distribución de combustible en la Isla”. Una fórmula que busca, según dijo entonces, acabar con el oligopolio existente, y que pasaría por emplear terrenos donde no esté expresamente prohibida la colocación de surtidores, en función al Plan General de Ordenación del municipio o el Plan Insular de La Palma. Este podría ser el caso.