
Más que un respiro, un soplido. Arrancó fuerte la semana, con la ilusión de que mañana se despida la ola de calor que asomó el miércoles pasado y que ayer ha comenzado a abanicar en la mayor parte de España. Canarias es la única región que conservaba la alerta roja (riesgo extremo) por altas temperaturas. Si La Aldea de San Nicolás (Gran Canaria) marcaba el domingo la más alta del Archipiélago, con 43 grados centígrados, al día siguiente ha sido la localidad de Tasarte, en el mismo municipio, con 45,6 grados a las 15:40 horas, la que batía un récord nacional. La séptima zona más calurosa del país era a las 15:30 horas el aeropuerto de Tenerife Sur, con 44,2 grados. Al DIARIO iban llegando testimonios de conductores que circulaban en sus vehículos al ritmo de los 40. Y no se referían a una radiofórmula musical.
A las 5:30 horas, la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) registró la mínima en la estación de Izaña. Los días 14 y 13 han sido el segundo y tercero más calurosos en el conjunto del país desde 1941. El portavoz de la Aemet, Rubén del Campo, detalla que cerca de un centenar de puntos superaron los 25 grados centígrados por la noche y que, durante el resto de la jornada, unas 200 estaciones superaron los 40ºC, con récord absoluto de temperatura máxima en más de 20 observatorios.
La ola de calor deja, de hecho, “numerosos registros históricos”. El viernes 13, una docena de localidades alcanzaron o rebasaron los 45 grados centígrados, una cifra que llegó a 26 el pasado día 14.
El sábado hubo alrededor de 230 estaciones que midieron o superaron los cuarenta grados de temperatura máxima y, el domingo, siete estaciones giraron en torno a los 45ºC y unas 210, los 40ºC de máxima. De ellas, seis en Canarias.
Otra curiosidad: julio de 2021 se ha convertido en el mes más caluroso a escala mundial desde que se iniciaron los registros, en 1880. Lo constata la agencia meteorológica estadounidense. “Se suma al perturbador camino que el cambio climático ha establecido para el mundo”, ha declarado el administrador de la NOAA, Rick Spinrad.
En todo el planeta, la temperatura combinada de la superficie terrestre y oceánica fue de 0,93 grados Celsius por encima del promedio del siglo XX de 15,8, lo que lo hace el julio más caluroso en 142 años. Era una décima de grado más alto que en julio de 2016, que luego estaría empatado en 2019 y 2020.
Dicen que el tiempo es oro. Pues, quien encuentra una sombra descubre un tesoro. Los remedios caseros están al alcance de las manos: una para sujetar la puerta de la nevera y la otra, para la botella de agua.