Primer cuarto
El Lenovo Tenerife cambió rápido a Guerra por Shermadini después de dos canastas de Poirier 2-4. Tres minutos tardó en entrar Huertas para poner por delante a los suyos (7-4). El Madrid había impuesto un ritmo frenético que seguía el Canarias, pero los errores en ataque y la exigencia defensiva propiciaban un marcador corto a falta de dos minutos y medio para el final (12-14). El Canarias se desataría al final. Un Fran Guerra espectacular y un Wiltjer desinhibido permitieron al Lenovo Tenerife cerrar el primer cuarto con 21-14.
Segundo cuarto
El Real Madrid no pudo con la defensa del Lenovo Tenerife (23-18). Los de Laso estaban sin ideas, bloqueados y, aunque a los locales les costaba anotar, sabían administrar sus rentas (28-20). Todo un Madrid había anotado 20 puntos en 15 minutos de juego. Insólito y tremendamente meritorio por parte del Canarias. Los madridistas tiraban de calidad individual y quejas a los colegiados, pero nada funcionaba. Pero un chispazo reactivó al Madrid. Solo un triple de Salin paró la reacción (35-29). El mejor ejemplo del nivel defensivo del Lenovo Tenerife es el 0 de 15 en el triple de los madridistas. El resultado al descanso mantenía por delante al Canarias (37-31).
Tercer cuarto
Gran salida del Lenovo, con intercambio de canastas (42-35) hasta que Sulejmanovic tuvo que ser atendido por un corte en la cara. Al Canarias le empezaba a costar atacar porque jugaba acelerado. Cuatro cambios introdujo Vidorreta. Shermadini, Sastre, Sergio y Huertas saltaron a pista y la cosa funcionó: 49-42 para tomar aire. Los resbalones en el parqué y las quejas de Pablo Laso capitalizaron buena parte de este cuarto, en el que el cuadro insular echó en falta aportación de jugadores como Sastre o Doornekamp (53-48).
Último cuarto
En 30 segundos del último cuarto, al Lenovo Tenerife le pitaron tres segundos en la zona y dos faltas (una de tres tiros libres). 53-51 y vuelta a empezar. Un triple de Williams-Goss puso por delante al Madrid (55-59) dominado el duelo junto a Yabusele. Mazazo que llegó de manos de Casseur porque, tras empatar el Canarias a 59 el galo anotó cinco tantos seguidos (59-64). Una falta permitió a Doornekamp acercar a los suyos (62-65) y Shermadini puso a dos al Lenovo (65-67), pero la madurez del Real Madrid acabó por decidir (70-72).
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