Óscar Izquierdo, presidente de Fepeco, recordó ayer que en el Archipiélago los poderes institucionales se han repartido, históricamente, de manera equilibrada entre las distintas islas: el Parlamento, en Tenerife; la Delegación del Gobierno, en Gran Canaria, o el Diputado del Común, en La Palma. A su juicio, la “madurez de nuestra Comunidad Autónoma” exige también descentralizar ya los servicios administrativos y directivos de las distintas Consejerías, toda vez que estamos en la época de la digitalización y del teletrabajo.
En opinión del líder de la patronal de la construcción, la Isla Bonita y sus habitantes tienen que ser la prioridad absoluta, después de las terribles circunstancias por las que han pasado y siguen soportando a raíz de la erupción del volcán de Cumbre Vieja. “Por lo tanto, más que hablar, decir o prometer, hay que ejecutar, hacer y cumplir. En estas circunstancias, es fundamental para arrimar el hombro, levantar el ánimo y crear ilusión, sencillamente, dar ejemplo”, aseguraron desde Fepeco en una nota remitida a la prensa.
Es por eso que abogaron por el “traslado urgente” de la sede del Instituto Canario de la Vivienda (Icavi) a La Palma, “por lo menos durante el tiempo provisional que dicho organismo tiene previsto, de tres años, en el mantenimiento de los contenedores y casas de madera”. “El establecimiento en la Isla servirá para un mejor seguimiento de la caótica situación habitacional actual. Los cargos políticos directivos y todos aquellos funcionarios que hayan participado o estén actualmente trabajando en el desarrollo de los distintos expedientes, informes o propuestas, vivirán in situ las incidencias, ansiedades y angustias de los ciudadanos afectados, siendo seguro un gran apoyo moral”, añadió la organización.
“La cercanía siempre ayuda a solucionar los problemas con más acierto, de que lo que se ha hecho hasta ahora, por cierto, bastante discutible. Además, las instalaciones que se pueden utilizar como oficinas o dependencias del Icavi, pueden ser los mismos contenedores o casas de madera que han propuesto y que, después de un año, han colocado, con una lentitud típica de una administración que no sirve. En el Icavi no conocen la palabra urgencia y lo que significa. Además, en un acto de solidaridad humana, para demostrar que la política es servicio, los responsables públicos y los funcionarios que vayan, pueden alojarse en los contenedores y las casas de madera, para que de esa manera compartan la habitabilidad, confort y calidad de vida”, concluyeron.