El Consejo de Ministros del próximo 7 de febrero aprobará la retirada de la obligatoriedad de las mascarillas en el transporte público. El Gobierno justifica esta decisión al darse “una situación epidemiológica” de la pandemia de COVID-19 “muy estable en todos los indicadores”.
Los expertos consultados por DIARIO DE AVISOS aconsejan que, pese a que dentro de una semana la mascarilla dejará de ser obligatoria en el transporte público, las personas mayores y vulnerables deberían seguir utilizándola, de manera voluntaria, por su bien. Hoy se cumplen tres años de la declaración de emergencia internacional del brote de coronavirus por parte de la Organización Mundial de la Salud (OMS) y del primer caso oficial de contagio en España, detectado en un turista alemán en la isla de la Gomera.
El Gobierno ya dejó caer que la posibilidad de eliminar la obligatoriedad de los cubrebocas estaba cada vez más cerca, lo que fue aplaudido por varios sectores, pero también ha merecido críticas desde varias comunidades, en especial las gobernadas por el Partido Popular.
La mascarilla dejó de ser obligatoria en entornos exteriores hace casi un año, el 10 de febrero de 2022. Dos meses después, el 20 de abril, también dejó de imponerse en interiores, salvo en el transporte público y en centros sanitarios, centros sociosanitarios para trabajadores y visitantes, servicios sanitarios y farmacias.
La decisión viene condicionada, además de por una situación “controlada” de la COVID, por la eliminación en Alemania de la obligatoriedad de llevar cubrebocas en los viajes de tren larga distancia el próximo 2 de febrero, una laxitud que ya existía en el tráfico aéreo. Allí solo serán obligatorias en centros sanitarios y residencias de ancianos. El Ejecutivo alemán apelará a la “responsabilidad individual” y la “voluntariedad” del uso.
La ministra de Sanidad, Carolina Darias, argumenta que los expertos que conforman la Ponencia de Alertas han decidido que “es el momento propicio para su eliminación”. Pero antes, el Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud se reunirá para “tramitar la parte administrativa, participar y llevarla a efecto”.
Varios expertos consultados por DIARIO DE AVISOS también se muestran partidarios de su eliminación, aunque recomiendan a la población su uso voluntario en las situaciones de riesgo.
El Jefe de Epidemiología de la Consejería de Sanidad, Amós García Rojas, afirmó que la retirada de la mascarilla es “razonable”, por los datos favorables sobre la evolución de la pandemia. Sin embargo, reiteró que en su opinión “sería bueno esperar hasta marzo” en el fin de los virus respiratorios “para evaluar la situación y tomar una decisión”.
García hizo hincapié en que la mascarilla son “un instrumento tremendamente valioso en la lucha de la pandemia, dejan de ser obligatorias pero siguen siendo recomendables” para determinadas personas si tienen una edad avanzada o son vulnerables a causa de una patología y han de acudir a un espacio cerrado o incluso abierto pero con mucha gente; de ser así, “deben seguir usando la mascarilla”. “Como medida preventiva, ha sido fundamental, y se ha compaginado con el papel relevante de las instituciones epidemiológicas, junto con las vacunas”.
Mientras, el catedrático en Microbiología de la ULL Antonio Sierra manifestó que “en febrero normalmente tendremos en Canarias un ligero ascenso de las incidencias de enfermedades respiratorias”, pero insistió en su uso obligatorio en “centro sanitarios y residencias sociosanitarias” y recomendó a la sociedad que la use voluntariamente “en lugares interiores donde hay mucha aglomeración de personas y en el transporte si son vulnerables”.
Reiteró que las mascarillas y la vacunación han sido pilares en la lucha y el control de la COVID y reiteró que debe mantenerse su “uso responsable”, refiriéndose a todas aquellas personas que tengan cuadros catarrales, gripales, de COVID u otras enfermedades respiratorias”.
Sierra insistió en que “el virus sigue activo y tiene mucha más capacidad de transmisión por las nuevas variantes”, por lo que instó a “no bajar la guardia” y estar atentos.
Por otro lado, el catedrático de Parasitología de la Universidad de La Laguna Basilio Valladares afirmó que “hay que convivir con la COVID” y valoró que “en algún momento había que quitar su obligación”, y ahora los datos epidemiológicos están “bastante controlados”.
El experto recordó que “en la COVID va a ocurrir más o menos como la gripe; si hay pocos casos habrá menos hospitalizados, y si hay muchos contagios, tendremos más ingresos y fallecidos”. Por tanto, abogó por “tener responsabilidad y utilizar la mascarilla” cuando tengamos síntomas de estar “afectados con una enfermedad respiratoria o interactuemos con vulnerables. Como el resto de patologías respiratorias, afectará a los más sensibles y vulnerables”.
En opinión del presidente del Colegio de Médicos de Santa Cruz de Tenerife, Rodrigo Martín, todavía “hay que ser prudentes porque hay muchas cosas que no sabemos sobre la COVID hasta que no tengamos bien estudiada esta enfermedad”. Por tanto, apeló a la “responsabilidad” a la hora de mantener el uso de la mascarilla. “Si no lo hacemos por nosotros, debemos ser empáticos para proteger al que tiene problemas”, pues nuestros actos “no solo nos afectan a nosotros”. Para Martín, “es aconsejable su uso cuando una persona tiene una enfermedad respiratoria” o cuando acude a “sitios interiores, cerrados y sin suficiente ventilación”.
En la misma línea, el doctor Antonio Alarcó alertó de que “estamos en pandemia y no hemos salido de la misma, lo que pasa es que hay un nivel de contagio menor”. El cirujano tiene claro que la decisión de retirar la mascarilla “debería ir unida a otro tipo de medidas”, como es “fomentar la cultura de la purificación del aire”, y reiteró que “podríamos prescindir en ciertos momentos de la mascarilla en interiores, con una medida del CO2 de forma permanente, un aparato que vale pocos euros, y que debería estar en todos los recintos cerrados, y en invierno más, para ventilar el lugar”.
Alarcó lamentó que esta medida “no está sustentada en ningún criterio científico” que conozca y se preguntó si “tendrá que ver con la presentación de la candidatura” de Carolina Darias a la alcaldía de las Palmas de Gran Canaria, “o si estará vinculada con los Carnavales”.
Por último, el presidente de la Sociedad Española de Epidemiología (SEE), Óscar Zurriaga, apoyó la retirada de los cubrebocas porque la situación “se ha mantenido estable durante las últimas semanas” y el mantenimiento de medidas más allá de “las situaciones de picos que ya no estamos viendo no parece ser razonable”. Incluso, “hace meses que pudo haberse eliminado”.
Se cumplen tres años del primer caso de COVID-19 en Canarias
Se cumplen tres años del primer caso oficial de coronavirus en España, detectado un 30 de enero de 2020 en La Gomera. Un grupo de cinco alemanes fueron aislados en el hospital Nuestra Señora de Guadalupe después de que uno de ellos diera positivo. Casi nadie esperaba que fuera algo tan grave y creían que se resolvería dentro de China. Sin embargo, ese 30 de enero, la OMS elevó la COVID-19 a la categoría de alerta mundial por su riesgo. Después llegó un confinamiento total, meses de encierro que han dejado tocada la salud física y mental. Han muerto por COVID 2.234 personas en las Islas, 118.434 en España y 6,8 millones en el mundo.