Por Benjamín Reyes / Juanma Sayalonga (Sevilla, 1988) ha presentado en el 18º Festivalito de La Palma el documental Eterna, que aborda la figura de Gata Cattana, que ha codirigido junto a David Sainz. Gata Cattana, cuyo verdadero nombre era Ana Isabel García Llorente, era una joven rapera y poeta que falleció con solo 25 años en 2017 por un shock anafiláctico, y que se ha convertido en un icono para los jóvenes, para los que el rap es una forma de mostrar su inconformismo y su rebeldía.
-¿Quién es Gata Cattana?
“Una persona que ha dejado una huella en mucha gente. Una chica que estaba haciendo muchas cosas. Cantaba rap y escribía poesía. Era una figura clave en ciertos círculos sociales. El único disco que publicó, Banzai, se publicó de forma póstuma gracias al esfuerzo de su familia y sus amigos. En vida se auto editó el poemario La escala de Mohs, que se ha reeditado en tres ocasiones. Es importante que no se pierda su legado y que su memoria siga viva”.
-¿Qué vínculo tenía con ella?
“Éramos amigos. La admiraba mucho. Fue un palo emocional su pérdida. Sentía que estaba haciendo cosas importantes. Ella estaba dispuesta a cambiar las cosas”.
-¿Por qué cree que se ha convertido en un icono entre la gente joven?
“Era una persona que tenía una manera especial de comunicar. Yo no he sentido lo mismo con otra artista. De lo complejo, de lo negativo, arrojaba luz. Hablabas cinco minutos con ella y te dejaba encendido”.
-En el documental aparecen Mala Rodríguez, Sara Socas o Frank T. ¿Por qué deciden seleccionar a estos cantantes?
“Lo más importante es que aparece su familia y los artistas que trabajaron con ella como DJ Carlos Esteso y Aenege. Frank T puso su música en la radio y contribuyó a que se conociese. Mala Rodríguez es el referente del rap nacional y era el referente de Gata Cattana. Y Sara Socas tenía a Gata Cattana como referente”.
-¿Por qué cree que la música rap conecta con la juventud?
“Porque la juventud suele ser inconformista y rebelde y el rap tiene mucho de eso”.
“Queríamos captar la esencia de Gata Cattana sin caer en el morbo”
-Ella era de Córdoba, ¿qué vínculo tenía con Granada?
“Era de Adamuz, un pequeño pueblo de Córdoba de 4.000 habitantes. Estudió Ciencias Políticas en Granada. Para ella estudiar en Granada fue una explosión. Se empezó a dar cuenta de su potencial y empieza a trabajar su faceta artística”.
-¿Cómo ha recibido la familia la película?
“Muy bien. Ellos han colaborado desde el primer momento. Mi intención era hacer un homenaje a su figura. Cuando han visto la película se han quedado contentos y se han emocionado”.
-¿Cómo se han repartido la función de dirección?
“Yo ya tenía un trabajo hecho de recopilar entrevistas y recoger información. Con todo el material, David y yo empezamos a montar la película. Ha sido muy fácil trabajar con él. Hemos ido al unísono y he aprendido mucho de él. Los dos teníamos muy claro que queríamos contar su historia de una forma cercana sin caer en el morbo. Queríamos captar su esencia como artista”.
-Susana Pinilla está preparando una tesis sobre rap feminista e incluye a Gatta Cattana.
“La incluye porque ella intelectualmente estaba dispuesta a cambiar muchas cosas y se ha convertido en un icono para las nuevas generaciones, porque ella ponía debates sobre la mesa que nadie ponía. Tenía análisis muy profundos. Le gustaba la literatura clásica. Cita filósofos en sus letras”.
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