En el año 2013, tras el fallecimiento de su esposo, E.F.G, creyó que la Virgen María la había elegido y proclamado santa. Poco después, la mujer asegura que comenzó a recibir llamadas en las que Jesucristo le pedía dinero a cambio de “abrir una cuenta en el cielo”.
Con el transcurso del tiempo, la situación fue intensificándose. El supuesto Jesucristo exigía que se realizaran transferencias a su cuenta o que la mujer se dirigiera a una sala de masajes en un establecimiento de León, donde debía entregar las cantidades en un sobre. El dinero iría destinado a la construcción “de una casa en el cielo”.
La víctima de engaño llegó incluso a autorizar que su pensión de viudedad de 800 euros fuera ingresada directamente en la cuenta del estafador. Este llegó a representar apariciones de Dios y de la Virgen para convencer a la mujer de que estaba en contacto con su difunta madre o esposo.
En otras ocasiones, llegó a amenazarla con dañar a sus hijos o malgastar todo el dinero donado si revelaba lo que estaba ocurriendo. “No digas nada. Si tus hijos me dan problemas, te los mato y te quedas sola”, le dijo en un audio de WhatsApp.
La víctima llegó a solicitar préstamos bancarios
La mujer se vio obligada a solicitar dos préstamos bancarios para seguir pagando la farsa hasta que llegó al punto de quedarse “sin un céntimo en el banco para comprar pan”. Sin oponer resistencia, la mujer entregó un total de 286.692 euros hasta el año 2019.
Fueron sus propios hijos quienes alertaron a la mujer de la estafa y la convencieron para presentar una denuncia. Según relata la familia, la señora no era especialmente devota, asistía a misa ocasionalmente. Sin embargo, el estafador logró manipularla de tal manera que la llevó a caer en un engaño que la condujo a la ruina financiera.
La víctima ha asegurado en el juicio que oía la voz y creía que era Dios. “No me atrevía a decirle nada a mis hijos porque creía que era la palabra de Nuestro Señor y Quién le dice que no a Dios”, lamentaba.
El acusado, amigo de la familia, ha negado los hechos de presenta estafa, alegando que la mujer siempre fue “muy obsesiva, reiterativa, pesada y enajenada”. En defensa, aseguró que amenazó a los hijos para que la mujer abandonara la tienda, ya que tenían conversaciones extrañas.
El Ministerio Fiscal pide para V.J.P.C. ocho años por un delito de estafa.
