Hoy se reanuda el curso político en el Parlamento de Canarias, donde de nuevo estará presente la Agrupación Socialista Gomera (ASG), con tres escaños, decisivos para seguir dentro del Gobierno regional, ahora junto a CC, PP y AHI, después de que no pudiera renovarse el llamado Pacto de las flores, en el que también estuvo presente ASG, formación capaz, por su versatilidad, de gobernar con unos y con otros, como manifiesta su líder, Casimiro Curbelo.
-¿Cómo encara este nuevo curso político?
“Este Gobierno tiene estabilidad parlamentaria y cabe esperar estabilidad política y respuesta, pero lógicamente vivimos un momento en la política donde es difícil encontrar espacios para el acuerdo. Hay asuntos de extraordinaria actualidad, como el repunte de la crisis migratoria o esos incendios pavorosos, como los sufridos en La Palma y Tenerife. Y también hay que mirar lo que ocurrió en La Gomera con ese cero energético y que puede ocurrir en otras islas. Con estas cuestiones no se debería hacer política partidista, sino sumar y mejorar”.
-¿Y qué hacemos con la crisis migratoria, más de 1.300 personas en apenas 48 horas?
“Este es un fenómeno complejo, que está tomando una dimensión desproporcionada. No es normal que recibamos más de 1.200 personas, de ellos 200 menores, en 48 horas, porque no hay medios para acogerles. No solo se trata de pedir al Estado medios para los centros de acogidas, sino que hay que poner medios también en la diplomacia y en acuerdos de cooperación con los países emisores, cuando más del 70% de los migrantes que llegan a España lo hacen por la puerta sur, en Canarias. Tenemos que replantearnos seriamente cual es el nivel de cooperación con esos países emisores”.
-Dentro de esos medios, usted ha demandado que se vuelva a poner en funcionamiento el CATE (Centro de Atención Temporal de Extranjeros) de La Camella, en San Sebastián.
“Nosotros no somos ajenos a esa realidad. De hecho, ya en su día La Gomera llegó a tener muchísimos inmigrantes en La Camella, que se montó desde época de la vicepresidente Teresa Fernández de la Vega, pero hoy, aunque sigue teniendo módulos, está abandonado. Tenemos que tener esos lugares de acogidas en perfecto estado y he pedido al Gobierno que lo recupere, porque el Cabildo de La Gomera siempre ha colaborado en esta materia”.
-Hoy llevará al Parlamento el reciente cero energético de su isla, con la idea de reforzar el sistema en el resto de Canarias…
“Ya hemos sufrido ceros energéticos en varias islas y de lo que se trata es de que esto no vuelva a suceder. Tenemos que hacer un debate político para construir y no para confrontar. Nosotros tenemos la petición de la comparecencia para hablar del cero energético, sobre todo para poner remedios. Aquí lo importante es que Canarias sea una excepción y se cumpla lo que ha planteado Red Eléctrica, que habla de la necesidad de que las Islas tengan no una central térmica, sino dos, y tres en las islas capitalinas, mientras simultáneamente se sigue apostando por las energías renovables. Desde luego, la normativa de la ley de 2017, que intentó evitar los monopolios de generación de energía para que se cambiaran los grupos, no está llegando”.
-A día de hoy, ¿cómo está funcionando la central de El Palmar?
“A día de hoy, todos los grupos que se quemaron están operativos, pero yo he pedido que cuanto más puedan inyectar energía de los parques eólicos, mucho mejor, aunque solo cuando hay viento, porque nosotros no podemos almacenarlo. He pedido que, como vienen las Fiestas Lustrales, se mantenga la minicentral que se trajo de La Palma, cuando la población en estas fiestas se doble y casi triplica, y que se mantenga hasta que concluyan las fiestas. Pero imaginemos una isla como Gran Canaria o Tenerife con otro cero energético, con un millón de habitantes cada una de ellas. Sería catastrófico”.
-Las llamadas Islas Verdes siguen sufriendo el elevado precio del combustible, con 20 o 30 céntimos más caro que en Tenerife, pese a que Fernando Clavijo anunció la rebaja del impuesto al combustible. ¿Para cuándo esa rebaja?
“El litro de combustible está teniendo un precio desorbitante. Ya intenté plantear una Proposición No de Ley (PNL) para solucionar este asunto, que no debatimos en la pasada legislatura porque no estaba en el pacto de gobierno. Lo que está claro es que tenemos que moderar el precio de la gasolina en islas como El Hierro o La Gomera, y creo que el Gobierno está en ello, en moderar el coste de la doble insularidad, ese es el compromiso del Ejecutivo”.
-¿Y cómo lo hace?
“Hay varias fórmulas para hacerlo, hay que buscar las más adecuadas y que sean compatibles, como permitir la competencia. Yo recuerdo consignar un millón de euros del presupuesto autonómico de hace varios años para sufragar la diferencia del sobrecoste y venía el problema de que no lo permitía el Tribunal de la Competencia. Yo iría más a una decisión autonómica, con una reducción del coste del combustible, teniendo en cuenta el consumo, y eso pasa para bajar la fiscalidad”.
-¿Por qué no se ha rebajado el IGIC como prometieron Coalición Canaria y Partido Popular en la precampaña electoral?
“Esa es una realidad bastante compleja, entre otras cosas porque los tributos del REF;en concreto, el IGIC, son parte de titularidad de los ayuntamientos, de los cabildos y del Gobierno. Por lo tanto, bajarlo se puede siempre viendo como va la economía. Es verdad que el Parlamento de Canarias puede legislar, pero siempre con un preacuerdo con la Fecam y con la Fecai. Esto dependerá de cómo evolucione la economía; es verdad que se ha incrementado la recaudación del IGIC, pero hay que saber que estamos todavía soportando los efectos de la guerra de Ucrania, con el incremento de la cesta de la compra y una gran inflación”.
-No le veo muy partidario de esa rebaja.
“No todo es como uno quiera, sino como la realidad económica vaya permitiendo. El Gobierno ya adoptó la supresión del impuesto de Sucesiones y Donaciones, que algunos lo ve insuficiente. Tampoco hay que ponerse nervioso, y lo digo por la oposición, hay que relajarse, porque la legislatura está comenzando. En Sanidad hay un sobregasto de más de 556 millones a día de hoy. Nosotros estamos elaborando un presupuesto, pero aún no nos han dicho el Estado cual es el techo de gasto, aunque habrá mayor inversión, por la recaudación por el IGIC. Una cosa es ver los toros de la barrera y otro torearlos”.
-¿Está usted satisfecho del reparto de áreas que ha conseguido ASG en el pacto?
“Estamos en ese proceso. Ya hemos logrado la delegación de la oficina canaria en Madrid, las direcciones generales de Infraestructuras Viarias y las educativas, la Dirección General de Pesca y empresas públicas, como Hecansa, Visocan o Gesplan. Tenemos muchas áreas y mucho trabajo para producir de una forma armónica y pensando en la gente”.
-El lunes comenzó el curso escolar y con huelga en el CEO Vallehermoso, porque han unido los cursos de Primero y Segundo de la ESO…
“Sé que hay muchas cosas que resolver en los colegios. En este caso comparte la reivindicación y la demanda de los padres y alumnos. Es verdad que Vallehermoso tenía una población importante y ha ido perdiendo alumnos, pero la Consejería tendrá que atender esta demanda del colegio de Vallehermoso”.
-Por último, ¿está usted a favor de una ley de amnistía para que haya un acuerdo del PSOE con los independentistas catalanes y lograr así la investidura de Pedro Sánchez?
“Yo estoy a favor de la racionalidad en la defensa de la Constitución y de los poderes del Estado. Cuando nos excedemos en un sentido u otro vamos socavando los principios de la democracia. No se puede atender todo aquello, por mucha legitimidad que se tenga por el número de parlamentarios. Hay una división en la sociedad española, en cuanto a la amnistía, la convocatoria de un referéndum en Cataluña o perdonarles una deuda de 32.000 millones de euros que prescribe ahora, que influiría en la financiación autonómica de todo el país. Hay que pensar en la convivencia democrática. Es verdad que es previsible que haya una investidura de Pedro Sánchez y no de Feijóo, pero vamos a pensar en el futuro, pensar en cosas estables, y aunque se pueda lograr de forma aritmética podría fracturar la sociedad española”.