El Lenovo Tenerife logró el segundo triunfo del curso en la Basketball Champions league tras imponerse a un VEF Riga que fue combativo hasta el descanso (76-55). Tras el paso por los vestuarios el Canarias solo concedió 19 tantos a su rival, y eso que contó con las bajas de Sastre (problemas musculares) y Guerra (proceso gripal).
El Canarias, además, se mantiene en la pugna por su objetivo de acabar como primero de grupo.
Los errores en el tiro exterior dejaron a los locales con solo seis puntos en cinco minutos de juego (6-8). Shermadini, autor de los seis tantos de los suyos, tuvo que buscar respiro en el banquillo y sus sustituto, Dusan Ristic, anotó los mismos puntos para mantener a los suyos cerca en el marcador, porque el VEF Riga dominaba al final de la primera manga (15-19).
El tiro exterior local, con solo un triple de siete intentos castigaba a los de Txus Vidorreta.
Huertas trataba de contener a Adams, que desequilibraba a favor de los suyos generando situaciones de superioridad que llevaron al VEF Riga a poner el 20-29 en el marcador y obligando al banquillo local a parar el partido. El Lenovo Tenerife no se encontraba.
Curiosamente, y no es la primera vez que pasa, cuando el Canarias pareció estar contra las cuerdas fue cuando mejor reaccionó. Con los letones logrando canastas imposibles, llegando al 23-34, los locales consiguieron reaccionaron gracias a su defensa y, con un parcial de 12-2 cerraron las cosas al descanso con 35-36.
Fue netamente superior el Lenovo Tenerife en la tercera manga. A Riga le pasaba factura la rotación corta y Jaime, desatado, lideró a los suyos en ataque (51-42).
El colegiado Aleksander Glicic se lesionó, teniendo que pararse el duelo algunos minutos, peor los locales no se enfriaron. Con el mismo líder cerraron la manga con 57-46. El partido parecía dominado.
Un triple de Abromaitis obligó al banquillo visitante a pedir tiempo muerto. Si a Riga se le escapaba el Canarias no tenía capacidad de respuesta y quedaba mucho tiempo por delante, más de nueve minutos (60-46).
La dinámica no cambió. El Lenovo Tenerife puede presumir de ser competitivo hasta el último segundo y contra Riga no fue menos. En ataque no perdió una oportunidad y en defensa ahogó a un rival que en los últimos cinco minutos suplicaba porque llegara el final (76-55).