El Cabildo de Tenerife ha celebrado este viernes un pleno extraordinario para aprobar por unanimidad la declaración de emergencia hídrica en la Isla cuando la sesión se ha visto interrumpida a gritos.
La presidenta insular, Rosa Dávila, estaba leyendo la declaración cuando dos activistas que estaban en el Salón de Plenos comenzaron a cargar contra la política turística de la institución y el elevado consumo de agua.
“Los canarios dicen basta. Se están cargando las islas”, chillaron las ciudadanas al tiempo que advertían que la Isla está colapsada y hacían referencia a macroproyectos turísticos, como Cuna del Alma o el hotel de La Tejita.
Asimismo, preguntaban si la declaración de emergencia hídrica también provocaría cortes de suministros en las zonas turísticas. En referencia a esta cuestión, aseguraban que “los turistas consumen hasta 6 veces más agua que los residentes”.
“Quieren acallar a la gente, escuchen al pueblo. Dejen su modelo de crecimiento brutal”, protestaron mientras afirmaban que hablaban “en nombre de mucha gente”.
Ambas activistas han sido desalojadas del salón después de que la presidenta ordenara un receso.