Más de 8.000 corales de 70 especies diferentes y unos 10.000 peces conviven en Coral Kingdom, la nueva instalación de Loro Parque que fue inaugurada ayer y con la que el grupo empresarial muestra su compromiso con la preservación de esta especie, cuya situación es crítica pese a que constituyen “la belleza de los mares”, declaró su presidente, Wolfgang Kiessling.
Se trata del mayor arrecife de coral fuera de los océanos, un espacio que aporta una experiencia inmersiva única, al combinar naturaleza con la tecnología visual más vanguardista en casi 40 metros de largo de un cristal transparente y con forma de serpiente, que aporta sensación de movimiento y fluidez, en más de 260.000 litros de agua.
El presidente de Loro Parque recordó que los jardines zoológicos y botánicos “son los guardianes para los animales salvajes y las especies exóticas. Si no actuamos como embajadores, su vida sería más dificil”, recalcó. En este sentido, recordó que en el año 1994, y con el objetivo de recuperarlas, se creó la Fundación, que logró evitar la extinción de 12 especies de papagayos y que trabaja para erradicar los materiales que pueden dañarlas, como el plástico.
Actualmente, añadió Kiessling, tiene 80 proyectos activos en todo el mundo, como CanBio, que estudia el impacto del cambio climático en las aguas y la biodiversidad marina de Canarias, para el que cuenta con la colaboración del Gobierno regional y las universidades de La Laguna y Las Palmas de Gran Canaria. La instalación, que abrirá al público en los próximos días, fue inaugurada ayer con la asistencia de un numeroso público y autoridades, entre las que se encontraban el obispo de la Diócesis Nivariense, Bernardo Álvarez, quien bendijo la instalación; la presidenta del Cabildo de Tenerife, Rosa Dávila; y el alcalde de Puerto de la Cruz, el socialista Marco González.
Fue este último quien destacó el esfuerzo “impagable” de Loro Parque en la promoción de Puerto de la Cruz como destino turístico, para seguir recibiendo más visitantes, “no solo en número, sino en calidad y con mayor conciencia”.
También hizo referencia “a todas aquellas voces que están en contra de los zoológicos”, y dejó claro que Loro Parque “no es un zoológico, sino un ejemplo de compromiso y sostenibilidad y un auténtico escaparate del mundo concentrado en un lugar encantador”. Asimismo, añadió que, “a esas voces que surgen por ignorancia y desconocimiento, solo seremos capaz de pararlas si seguimos poniendo en valor a Loro Parque”.
Rosa Dávila también advirtió de la situación crítica en la que se encuentran los corales. “Solo el 1% de la superficie del océano está cubierta por corales, esenciales para la supervivencia de múltiples especies de peces. Sin embargo, se calcula que el 90% podrá desaparecer en el año 2050 con unas consecuencias devastadoras para los ecosistemas marinos”.
Por eso, recalcó la importancia de apostar por el medio ambiente, como hace Loro Parque, “y hacer una llamada de atención sobre aquellos ecosistemas más frágiles que se encuentran en riesgo de extinción, también en Tenerife y en el mar que nos rodea”, sostuvo.