Desde ayer, residentes y visitantes de Santa Cruz de Tenerife han sido testigos de una preocupante escena en el mar. Una enorme mancha de color marrón se ha extendido en la costa de la capital, entre el Auditorio Adán Martín y el Castillo Negro.
La situación ha llegado a su punto álgido este jueves, a las 16.00 horas, cuando la mancha se ha empezado a distinguir a decenas de metros de distancia.
La estampa podría ser el resultado de un vertido de aguas fecales por la continua liberación de contaminantes desde un emisario en la zona. La sospecha recae en el emisario vinculado a la estación de pretratamiento y bombeo, la cual lleva meses en obras en el mismo lugar.
Los residentes exigen una acción rápida y eficaz para resolver esta situación.