La Laguna Tenerife se impuso por 75-86 en Granada en un duelo marcado por un gran último cuarto de los aurinegros, en el que anotaron 33 tantos con un Fran Guerra que se fue hasta los 14 puntos. El grancanario que se fue hasta los 30 créditos de valoración, supo dar la cara en un mal día de Gio Shermadini.
Es cierto que el Canarias necesita que más jugadores aporten durante el partido, porque en anotación el trío Kramer, Scrubb y Guerra estuvieron muy solos (entre ellos anotaron 58 de los 86 puntos de su equipo).
Clavell fue una pesadilla para la defensa de La Laguna Tenerife en el inicio, anotando siete tantos de inicio (9-4). La defensa local estaba bien plantada, cortando las líneas de pase de La Laguna Tenerife (13-16).
Con empate a 16 se llegaba al final de una primera manga en la que las pérdidas, seis, lastraban al Canarias ante un Granada que tenía muy claras sus ideas: rocosos en ataque y confiando en sus anotadores.
Le costaba a La Laguna Tenerife frenar los uno contra uno de los exteriores locales (22-20), algo que tenían que subsanar los pívots. Guerra y Gio se pusieron con dos faltas cada uno, dando entrada a Ilimane Diop, que disputaba sus primeros minutos en Liga Endesa.
David Kramer demostró estar en su mejor momento, anotando dos triples, machacando el aro de Granada y lanzando a los suyos con (24-29). Había anotado 12 puntos en nueve minutos.
Dos asistencias de Huertas a Ilimane pusieron la máxima ventaja (25-35) pero en solo dos minutos las cosas cambiaron de manera radical tras anotar los locales seis puntos. Con 31-36 se llegaba al descanso.
Parcial de 4-0 local (35-36) en un arranque de tercera manga con demasiados errores por parte de ambos equipos. Un parcial de 14-6 fue demoleador para La Laguna Tenerife. Los insulares tenían un problema en la dirección de juego, algo que Vidorreta trataba de solventar con un tiempo muerto (45-42).
Kramer volvió a salir al rescate (45-49) y el Granada se precipitó, cometiendo faltas y dando la opción a los canaristas a anotar desde el tiro libre (48-52).
Con 51-53 y mucha presión en el Palacio de los Deportes de Granada se llegaba al final del cuarto.
Más acertado se presentaron los tinerfeños en los primeros compases de esta manga (52-64) con un Fran Guerra, brillante, dominando la pintura.
Pablo Pin paró el encuentro, pero no surtió efecto. Los de Vidorreta anotaron todo aquello que no habían hecho hasta ese momentos, también con canastas inverosímiles, consiguiendo una renta de 15 tantos (59-74).
Los granadinos no bajaron los brazos, pero la victoria, por 75-86 se vino a Tenerife.
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