
“Si no puedo echar una mano a un vecino necesitado o no puedo conceder una ayuda de emergencia, no sé que pinto yo de alcalde”, afirma José Juan Lemes, regidor municipal de Arafo que el pasado lunes fue denunciado en la Fiscalía provincial de haber comprado presuntamente votos en las elecciones municipales de mayo de 2015 como contrapartida a unas ayudas sociales a personas en riesgo de exclusión social, según los tres casos que pusieron en conocimiento del fiscal Eloy Cuadra y Francis Hernández, portavoces, respectivamente, de la Plataforma por la Dignidad y de Izquierda Unida en Arafo.
Lemes hizo estas declaraciones el lunes por la noche enel programa La Carretera del Sur de Onda Tenerife, horas después de enterarse de la entrega en Fiscalía de la documentación que supuestamente le compromete, aunque todavía está pendiente de que esa denuncia sea admitida a trámite y la haga suya el Ministerio Fiscal.
Precisamente por este hecho, Lemes se mostró comedido, al afirmar que “ahora mismo el asunto está en Fiscalía y poco más tengo que decir”, aunque si aventuró, en esta ocasión, que “tanto mi partido, Agrupación Independiente de Arafo, como yo, a título particular, vamos a llevar el asunto a nuestros abogados para tomar medidas contra aquellos que nos han calumniado con el único interés de hacer daño o para obtener réditos ocultos”. Lemes dijo estar estudiando una posible querella contra el canal de YouTube que difundió la entrevista con Teo Expósito, la vecina de El Sobradillo que le acusó de haberle mandado un coche a su casa para trasladarla hasta el colegio electoral de Arafo con la papeleta del partido de Lemes, tras haberse empadronado en el municipio donde vive su madre, a finales de 2014. “Vamos a ejercer acciones legales porque está en juego mi honorabilidad y la de todo mi grupo de gobierno, aparte de ponerse en riesgo la seriedad de la institución que presidimos”, afirmó levantando su habitual tono bajo de voz.
La ayuda a Teo
Lemes reconoce que ha ayudado a la madre de Teo Expósito y que fue él quien le indicó la necesidad de empadronarse en Arafo y abandonar la casa okupa de El Sobradillo, donde vivía con tres hijos, para poder “recibir ayudas de emergencia o tramitar la PCI, a las que tiene todos los requisitos para acogerse”, manifestó el alcalde, que negó en todo caso que “ese empadronamiento o las ayudas nada tienen que ver con que se le pidiera el voto, porque quien me conoce sabe que nunca pido el voto, solo explico a los vecinos lo que voy a hacer y nada más”, afirma el alcalde de los últimos cinco años en Arafo, sucesor de Domingo Calzadilla, de quien fue durante 15 años su secretario, y al que hoy no le profesa demasiada estima. “No sé si esas maneras, las de exigir el voto a cambio de ayudas, una práctica mezquina que denuncio y detesto, eran las del anterior alcalde”, dijo cuando se le preguntó si la compra de votos había sido una táctica habitual en el municipio antes de su llegada al cargo de regidor.
Las compras en la ferretería
José Juan Lemes no ocultó que el Ayuntamiento de Arafo compra el material en una sola ferretería, y lo hace porque “es la única que hay en el municipio”, contestando así a algunos de los reparos que ha tenido que levantar del interventor y que Izquierda Unida ya ha denunciado.
Lemes comenta que, precisamente, “aprobamos una moción de Izquierda Unida para informar de los contratos menores cada trimestre y en eso estamos”, advirtiendo que van “sacar los pliegos para la compra en ferreterías, gasolineras o incluso el pan para el geriátrico, pero lo que no puedo hacer es dejar de comprar por no reparar”.
En este sentido, el alcalde de Arafo comenta que cuando llegó se encontró facturas por servicios que tenían un retraso de 2.400 días y que hoy “Arafo está pagando a los proveedores en menos de 40 días”, afirmó.