La previsión de la vendimia en Canarias este año será “muy irregular” debido a que las condiciones meteorológicas han ocasionado un corrimiento de flor y una tardanza en la fructificación que ha afectado, a diferencia de otros años, a todas las islas, con reducciones de la cosecha de entre el 30 y el 50 por ciento y un retraso en la vendimia de entre dos y tres semanas.
Así lo ha expresado, en una entrevista a Europa Press, el presidente de la Asociación de Viticultores y Bodegueros de Canarias (Avibo), Hugo Luengo, que ha precisado que las condiciones serán distintas según la zona y que los datos no los podrán cerrar hasta el final de la campaña, si bien ya ha advertido de que ésta “no viene bien”.
En el caso de Tenerife, el presidente de Avibo señala que las zonas del norte y de medianías son las más afectadas en general. En el norte, en lo que es costa y zonas altas, “no están tan mal” pero lo que es la medianía está “fatal”; el sur está “relativamente bien, pero también hay problemas puntuales con las mismas circunstancias”.
En el resto de islas, Hugo Luengo detalla que la campaña “viene mal” en Lanzarote y El Hierro, “irregular” en La Palma y que en La Gomera, “al ser muy pequeña, no va a haber mayor problema”. “Quizás donde único ha estado más regular ha sido en Gran Canaria”, estimó.
El responsable de Avibo admite que no recuerda ningún año anterior a este donde la campaña haya sido más complicada y además, en todas las islas, y pone el ejemplo de Lanzarote, que el año pasado tuvo una “súper cosecha, con un 40 o un 50 por ciento más que la media de los años anteriores” pero que este año se prevé que sea una de las islas más afectadas, al pasar a cosechar en torno al 30 o al 40 por ciento de media.

EL TIEMPO Y LAS PLAGAS
Uno de los problemas fundamentales, dice Luengo, es que este año en la época de enero y febrero hubo calor y luego, en marzo y abril, hubo algo de frío, lo que ocasionó un corrimiento de flor, uno de los causantes del resultado final de la vendimia, al igual que el calor, aunque matiza que este “no ha sido dramático”.
Por el “caos” que ha sido este año el tiempo, Luengo asegura que donde no hay cantidad “seguro que se tendrá calidad” y espera que “lo que ahora es un problema grande se pueda minimizar” al cierre de la campaña.
Respecto a la ola de calor que está previsto que afecte a las islas hoy y mañana, el presidente de Avibo no considera que ocasione “mayor problema” ya que, por ejemplo, en algunas zonas bajas de Lanzarote la vendimia ya está “bastante adelantada” y la uva que queda está en la parte alta “y ahí las olas de calor tienden a minimizarse”.
En lo que se refiere a las plagas, y debido a que ha habido humedades, el oídio y el mildiu han atacado bastante en las zonas de medianías de Tenerife, apuntó.
VENDIMIA
El responsable de Avibo explica que la vendimia en Canarias suele empezar a mediados de julio y llegar hasta noviembre, lo que supone “un caso inédito en el mundo” porque, en otros sitios como en Francia o la península, “en un mes se las ventilan, pero aquí se llega a estar casi cuatro meses vendimiando”.
“Eso es un reflejo de la variedad de suelos, alturas y climas, pues tenemos sol norte y sur, con humedades muy distintas, soleamientos muy diferentes y vendimiamos desde el nivel del mar, desde cota casi cero a cota mil setecientos”, señala.
Pero lamenta que este año la vendimia se ha ralentizado: “En términos medios, la vendimia de este año empezó dos o tres semanas más tarde que en años anteriores”.
SITUACIÓN DEL SECTOR
Hugo Luengo cree que la calidad del vino no se verá afectada por estos problemas debido a que la uva que está en costa y en altura tiene poca afección y a que cuando las vendimias son cortas “la calidad suele ser alta, por regla general”, agregó.
Aunque insiste en que cada zona y cada sitio “tendrá su problema puntual, porque Canarias tiene desde cota casi cero a cota mil setecientos todas las oportunidades de medio climático y de altitud diferenciadas”.
“Indudablemente el vino canario está caminando, no solo aquí sino fuera, pero es complicado hablar de vino canario cuando lo que hay son vinos de Canarias en los que cada bodega está haciendo sus esfuerzos”, aclara.
En relación a la exportación, indica que este es el tercer o cuarto año que llevan trabajando en ese sentido y que los resultados “hasta la fecha son bastante satisfactorios”, pero lamenta que la viticultura este año “no vaya a acompañar”.
Por otro lado, la crisis también ha seguido afectando al sector, pues para el presidente de Avibo “pensar que la crisis no haya afectado a nadie es poco menos que imposible”.
Por ello, ha anunciado que en unos días o al cierre de la campaña, espera que la Asociación pueda reunirse con la Consejería de Agricultura, Ganadería, Pesca y Aguas del Gobierno de Canarias porque “sería muy oportuno” plantear un plan vitivinícola para las islas.
“Posiblemente, este sea el segmento del sector más debilitado, y si queremos tener perspectivas a largo plazo para el vino en esta región hay que asumir el tema vitivinícola con un poco más de claridad, el factor principal para estabilizar el sector del vino no está en otro sitio sino en la viña”, finalizó.