la laguna

Aguere derrocha solemnidad en el día grande del Cristo

El arzobispo emérito de Sevilla, Carlos Amigo, transmitió ayer un mensaje de esperanza con respecto al futuro de la Iglesia Católica
El Cristo saliendo en procesión desde su santuario, ayer por la noche, y misa por la mañana en la catedral, a la derecha. Fran Pallero
El Cristo saliendo en procesión desde su santuario, ayer por la noche. Fran Pallero

El buen tiempo y el calor acompañaron ayer durante la celebración del día grande de las Fiestas en honor del Cristo de La Laguna, que cumplió su 411 aniversario, desde que, en 1607, los Señores de Justicia de la Isla declarasen el 14 de septiembre día de fiesta, motivado por los milagros que obraba el Cristo, según se recoge en el libro El Santísimo Cristo de La Laguna, Historia, Fiestas y Tradiciones, de Domingo García Barbuzano.
La ciudad volvió a revivir ayer el día grande del Cristo, que estuvo acompañado por cientos de fieles a lo largo de los múltiples actos religiosos que se celebraron.

La jornada arrancó temprano, a las 07.00 horas, con los repiques a gloria en los campanarios de la catedral y restos de templos, así como con la Diana Floreada, a cargo de la Agrupación Musical del Santísimo Cristo de La Laguna, que recorrió las principales calles de la ciudad. A las 10.15 horas partió la procesión cívico militar del pendón real, desde las Casas Consistoriales hacia la catedral, donde el obispo de la Diócesis de Tenerife, Bernardo Álvarez, recibió a la representación oficial de la Casa Real, que este año la ostentó el presidente del Gobierno canario, Fernando Clavijo.

La santa misa, cantada por el coro del Orfeón La Paz, congregó a los principales representantes políticos, sociales y eclesiásticos de la Isla. La predicación, como ocurriera a lo largo del Quinario, corrió a cargo del arzobispo emérito de Sevilla, Carlos Amigo, quien “quiso transmitir, sobre todo, un mensaje de esperanza con respecto al futuro de la Iglesia. Asimismo, invitó a los presentes, con su marcado estilo envolvente y poético, a salir a las periferias existenciales para llevar a Cristo, el único que puede sanar todas las heridas”, según informó el Obispado a través de su portal Nivariense Digital.

Finalizada la solemne eucaristía, la venerada imagen salió en procesión de vuelta al santuario del Cristo. Este año, la santa imagen pudo realizar su recorrido habitual, tras volver a su santuario de la plaza del Cristo el pasado marzo, después de que finalizaran las obras de rehabilitación del templo.

Misa de campaña

A las 19.00 horas se repitió la misa de campaña en el atrio-plazoleta que precede al santuario, presidida por el vicario episcopal de La Laguna, Juan Antonio Guedes Suárez, y cantada por la agrupación musical Achamán. Este acto se realizó por primera vez el año pasado con motivo de las obras en el templo, y se decidió repetir por la buena acogida que tuvo.

A su término, el Cristo volvió a salir en procesión por las principales calles de la ciudad, visitando como siempre los conventos de las monjas clarisas y catalinas. Al volver a la plaza del Cristo, la venerada imagen contempló la tradicional exhibición pirotécnica desde la montaña de San Roque.

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