Diario de Avisos / Agencias
El mediocentro madrileño del CD Tenerife Aitor Sanz destacó ayer que estaba “muy feliz” por haber renovado su contrato con el conjunto blanquiazul, que vencía a final de esta temporada, y que no podía pensar “en otras opciones”, porque el club necesitaba de su compromiso.
En la rueda de prensa telemática que ofreció tras hacerse oficial su renovación hasta final de la próxima temporada con una cláusula de prórroga por una campaña más por número de partidos jugados, destacó que está en el club en el que quiere estar. “Tuvimos el proceso normal de una negociación y encontramos el punto en común; hubo un parón por esta crisis sanitaria, donde apartamos las cuestiones personales y al final llegamos a un acuerdo, que es lo que todos queríamos”, reiteró.
Aitor Sanz afirmó que se encuentra “cómodo” en el conjunto chicharrero y recordó que el club siempre quiso contar con él, incluso “cuando podían existir dudas” por su rendimiento con la lesión, que le hizo estar más de un año sin jugar. El capitán, que ha sido siempre titular desde que llegó a la Isla en el verano de 2013, insistió en que seguir “es la mejor decisión para todos”.
“Como plantilla entendimos que el club tenía que asegurar su solvencia económica, por ello nos hemos intentando adaptar a la situación; hubo demasiado ruido, pero no fue tanto como lo puede parecer”, dijo Aitor Sanz sobre las negociaciones que tuvieron los jugadores con el club para la salida del ERTE.
“Estamos dando pasos para que pueda regresar la competición; veo a mis compañeros y los noto a gran nivel, con un ritmo muy alto. Hay compañeros que me han sorprendido. Podemos dar guerra”, aseguró.
A Juan Carlos Cordero le quedan ahora tres asignaturas pendientes muy importantes, tratar de convencer a Dani Gómez y al Real Madrid y buscar la fórmula para que Milla acepte la oferta de renovación que tiene sobre la mesa. La otra, que continúe Rubén Baraja.
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