El presidente del Gobierno de Canarias Ángel Víctor Torres, la consejera de Educación Manuela armas y el consejero de Sanidad Blas Trujillo presentaron este jueves el protocolo que guiará a los centros educativos no universitarios en el inicio del curso postcovid, en el que se insta a cada centro escolar a tener un plan de contingencia atendiendo a unas directrices, por lo que se ha optado por retrasar el inicio de las clases de manera presencial al 15 de septiembre.
El objetivo de este documento es crear entornos escolares saludables y seguros a través de medidas de prevención higiene y promoción de la salud adaptadas a cada edad educativa y la posibilidad de detección precoz de caso y la gestión adecuada de los mismos. Será de de aplicación dentro y fuera del aula escolar.
Cada centro no universitario tendrá una persona responsable referente para los aspectos relacionados con el coronavirus que se comunicará constantemente con el personal sanitario de la zona del centro.
Los centros crearán en la etapa de infantil y primaria los denominados grupos de convivencia estable formado por los alumnos y el tutor y en caso de tensión de un posible caso su control y seguimiento será más fácil. Asimismo, los centros deberán deberán dividir al centro en compartimentos físicos denominados sectores bloqueables para evitar los contactos entre sectores y la interacción entre los alumnos en cuanto al uso de mascarilla no se recomienda para menores de 3 años.
Dentro del aula y a tenor del grupo de convivencia estable los alumnos de infantil y primaria darán las clases sin mascarilla al igual que su profesor tutor. En ESO Bachillerato y FP no serán de aplicación estricta los grupos de convivencia estable pero con la distancia de 1,5 metros interpersonal los alumnos podrán estar sin mascarilla que si deberán llevar los profesores específicos de cada materia cuando tengan que impartir en diferentes aulas.
Por supuesto el uso de la mascarilla es obligatorio en el tránsito seguro del interior de cada centro educativo. Además, las entradas entradas y salidas se organizarán de manera escalonada para evitar aglomeraciones.
Ante la detención de un posible caso la respuesta será a trasladar al alumno a un espacio individual de aislamiento, llamar a sus padres y también al teléfono covid del Gobierno de Canarias.
Manuela armas aseguró que “pondremos todo de nuestra mano para que los niños vuelvan a las aulas en la medida de lo posible con normalidad en espacios seguros.
Por su parte Blas Trujillo destacó que este es uno de los retos más importantes del Ejecutivo y de la sociedad canaria pues se mueven anualmente más de 700.000 personas entre alumnos profesorado trabajadores y padre. Destacó el trabajo conjunto entre las Consejerías de Educación y Sanidad con sus áreas de salud pública y atención primaria a la hora de elaborar este protocolo de seguridad para los alumnos y profesores.
Ángel Víctor Torres y el siguió que este protocolo pretende ofrecer una capacidad después para rápida en cada caso recordó que viene 13 de marzo se suspendieron las clases en Canarias y que este documento será cambiante según la previsible evolución de la pandemia en archipiélago
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