El plante de los siete concejales críticos de Arona en el último pleno municipal, dejando en minoría al resto de compañeros del grupo de Gobierno, que perdieron varias votaciones, entre ellas la que permitió a la oposición reprobar al alcalde por las críticas del presidente del PSOE aronero a los trabajadores del Ayuntamiento, descarta cualquier solución de “reconstrucción” entre ambos sectores.
Mientras los concejales afines a Mena (Leopoldo Díaz, Raquel García, Julia Morales, Francisco Marichal, Ruth Lorenzo y José Alberto Delgado) se preguntaban ayer si la incomparecencia de sus compañeros conllevará alguna medida disciplinaria por parte del partido o quedará en papel mojado, los críticos (Luis García, José Luis Gómez, Juan Sebastián Roque, Dácil León, Pura Martín, Elena Cabello y Yurena García) continuaban dando muestras de mantener el pulso y ayer no acudieron a sus despachos en el Ayuntamiento, excepto José Luis Gómez.
misión imposible
El secretario general del PSOE tinerfeño manifestó ayer que la ausencia del pleno municipal de la mitad del grupo de Gobierno es “un síntoma más de las dificultades y la casi imposibilidad de llegar a acuerdos”. En declaraciones a la Cadena Ser, el presidente del Cabildo calificó de “insostenible” la actual situación e indicó que “probablemente habrá que tomar decisiones en los próximos días”.
“Nadie duda de la honorabilidad del alcalde Mena, el problema es que el enfrentamiento se ha convertido en algo personal, ya no hay capacidad de sentarse a dialogar, lo cual es muy triste y doloroso”, señaló el dirigente socialista insular.
El presidente del PSOE y alcalde de Adeje, José Miguel Rodríguez Fraga, también ha expresado públicamente su escepticismo sobre una posible solución del conflicto. Pocas horas antes del pleno celebrado en el Centro Cívico de Cabo Blanco, Fraga subrayaba su “buena relación” con el alcalde y el resto de concejales, pero expresaba que ya era “tarde” para una “solución de reconstrucción”, por lo que cree necesario la “intervención del partido”.
Tanto la Ejecutiva federal como la regional e insular acordaron el pasado 11 de julio que José Julián Mena y el exedil de Urbanismo, Luis García, renunciaran a las actas de concejales y abandonaran el Ayuntamiento. Tres semanas después, ninguno de los dos lo ha hecho, aunque el exresponsable de Urbanismo anunció el día 14 su “firme intención” de poner a disposición del PSOE su acta de concejal.