
DA / Agencias
“Con la suficiente discreción”. El presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, declaró ayer, en el marco de la XIX Cumbre Hispano-Italiana que tiene lugar estos días en Baleares, que su estrategia migratoria está cimentada sobre la “solidaridad” internacional, no descartando la posibilidad de realizar derivaciones de Canarias a la Península. De ese modo, contestaba a la pregunta de una periodista que se interesó por conocer su opinión respecto a las imágenes dadas a conocer por EL ESPAÑOL / DIARIO DE AVISOS de varios grupos de indocumentados que, de acuerdo con las fuentes consultadas por este periódico, habían sido trasladados en avión desde las Islas a ciudades como Sevilla, Málaga, Madrid y Barcelona, en contra de la postura oficial del ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, que dijo oponerse a tales desplazamientos.
“Creo que la política migratoria es multidimensional en el fondo, y en la forma creo que es importante, desde luego, subrayar esa solidaridad entre territorios. Pero también contar con la suficiente discreción”, señaló el dirigente socialista.
Las palabras de Sánchez irían en concordancia con la petición del líder del Ejecutivo canario, Ángel Víctor Torres, que reiteró esta semana en el Parlamento regional la necesidad de “activar los mecanismos de repatriación y también reglada derivación al resto del territorio europeo”. Y, más concretamente, refiriéndose a “todo lo que es el continente, que empieza en Gibraltar y acaba en el Estado número 27 de la Unión Europea”. Además, reconoció que esta instancia se debía a que “Canarias no lo puede hacer sola”.
Precisamente en el transcurso del encuentro en Baleares, al que también acudió el presidente italiano, Giuseppe Conte, se suscribió un acuerdo entre España y el país transalpino para trabajar conjuntamente a fin de que el sentimiento de solidaridad se ponga en práctica en la UE. De hecho, se hizo público un documento que ya han trasladado a las autoridades comunitarias y al que por el momento se han sumado Grecia y Malta, en el que abogaban por un nuevo pacto sobre la migración.
Aun así, Sánchez consideró que la solidaridad debe ser compartida por todos, no solo por los territorios de entrada de los flujos migratorios; un aspecto que, aseguró, iría claramente definido en el referido pacto. “Debemos encontrar soluciones coordinadas para nuestros desafíos comunes”, recalca el documento. En este sentido, Conte insistió en abordar el problema de forma integral y que haya herramientas eficacez de redistribución de migrantes, puesto que, a su juicio, “un país no puede llegar a soportarlo todo”.
2.000 VULNERABLES
La cifra que sí se conoció ayer referente a las derivaciones a la Península es la de los inmigrantes vulnerables o aspirantes a protección internacional que, desde enero, han sido desplazados dentro del territorio nacional. Según fuentes consultadas por la agencia EFE, se trataría de cerca de 2.000 personas que, tal como reconoció a DIARIO DE AVISOS el ministro de Migraciones, José Luis Escrivá, “nosotros claramente los acogemos”, con vistas a prevenir que “queden en una situación de desprotección”.
Aparte, el titular de la cartera estatal dijo que desde el Ejecutivo central “estamos haciendo una interpretación bastante amplia del mandato de acogida, porque lo que nos exige la normativa es acoger a las personas vulnerables (…), pero la realidad es que la mayoría de los que están llegando a Canarias no cumplen esa tipología”.