sociedad

Canarias planta cara tanto al racismo como a la inseguridad migratoria

Pestana refuerza la presencia policial en los municipios turísticos grancanarios y anuncia expulsiones de los más violentos a la par que condena los bulos que pretender inocular el odio al foráneo entre los isleños
La comisaria europea de Interior, Ylva Johansson, reconoció ayer lo “mortífera” de la ruta canaria de las pateras; en la imagen, rescate de cadáveres tras un naufragio el pasado noviembre. EP
La comisaria europea de Interior, Ylva Johansson, reconoció ayer lo “mortífera” de la ruta canaria de las pateras; en la imagen, rescate de cadáveres tras un naufragio el pasado noviembre. EP
La comisaria europea de Interior, Ylva Johansson, reconoció ayer lo “mortífera” de la ruta canaria de las pateras; en la imagen, rescate de cadáveres tras un naufragio el pasado noviembre. EP

Ni una cosa ni la otra. Al igual que no se puede tolerar que inmigrantes irregulares acogidos en Canarias protagonicen actos de violencia en las Islas, es igualmente inadmisible que los racistas intenten inocular el odio al foráneo en un pueblo como el isleño.

El Archipiélago se enfrenta en este arranque de año con un peligro que DIARIO DE AVISOS ha denunciado en no pocas ocasiones, como es el hecho de que se intente rentar políticamente los problemas derivados del descontrol actual en la acogida de emigrantes a través de mensajes de odio al de fuera, como bien denunciaba ayer el delegado del Gobierno, Anselmo Pestana.

En una de sus mejores respuestas desde el inicio de la crisis, Pestana fue igualmente duro con los que, aprovechándose de la solidaridad isleña, protagonizan episodios tan lamentables como la reyerta acaecida en un aparcamiento de Maspalomas y en el que, pese a los bulos difundidos por quienes necesitan un amigo exterior para ocultar sus propias miserias, ni murió nadie ni queda impune, como demuestra la primera detención practicada por la Policía Nacional respecto a estos hechos.

Tan lamentable como esas agresiones físicas resulta la desvergüenza que supone mentir sobre lo acaecido para convocar manifestaciones contra un colectivo, el de los menores no acompañados reubicados temporalmente en hoteles, donde hay de todo, como en cualquier barrio de las Islas.

Por supuesto, a esta tipo de situaciones se ha llegado en parte por distintas causas, como es el hecho de que blindar la ruta del Estrecho ha desviado claramente la inmigración hacia Canarias, por no hablar de la pachorra con que el Gobierno de España se está tomando este asunto, y la mejor prueba de ello es que siguen inhabilitados todos los recursos que el ministro de Migraciones, José Luis Escrivá, anunció (power point mediante) cuando al fin encontró hueco para conocer de primera mano lo que está pasando aquí.

Por el contrario, hay que aplaudir a los eurodiputados isleños Juan Fernando López Aguilar y Gabriel Mato que, cada uno desde su visión política, coincidieron ayer en denunciar ante Bruselas esta crisis migratoria que la propia consejera de Interior de la UE, Ylva Johansson, reconoce como “gravísima” y “mortífera”.

El envío de 43 millones por parte de Bruselas para reforzar los sistemas de acogida son bienvenidos, pero son un parche. Las soluciones reales y efectivas pasan por las reubicaciones y las repatriaciones.

TE PUEDE INTERESAR