
El Ayuntamiento de La Laguna ha aprobado este martes un paquete de ayudas de emergencia al alquiler para 155 personas del municipio en riesgo de exclusión social, que percibirán hasta 3.000 euros en un pago único justificado para afrontar las cuantías pendientes.
Casi el 90 por ciento de las 174 solicitudes presentadas cumplen los requisitos técnicos establecidos y han sido admitidas en el marco de esta medida extraordinaria, que supondrá una aportación total de 363.542 euros, detalla el consistorio lagunero en un comunicado.
Las ayudas están financiadas con 300.000 euros procedentes de la línea de subvenciones del Cabildo de Tenerife para paliar los efectos sociales de la pandemia, mientras que el área de Bienestar Social ha decidido aumentar la dotación municipal en 63.542 euros para llegar a más familias.
El concejal de Bienestar Social, Rubens Ascanio, recuerda que la corporación insular concedió a La Laguna una subvención de 561.273,60 euros con cargo a la línea de subvenciones directas, por razones humanitarias, para paliar las situaciones de vulnerabilidad social derivadas de la pandemia.
De esta cuantía, inicialmente se acordó destinar 300.000 euros a reforzar las ayudas al alquiler, no obstante, “ante el aumento de la demanda que estamos registrando, el área ha incorporado 63.542 euros más para llegar al mayor número de personas posible y contribuir a que estas familias no se queden sin vivienda”, explica.
Los 261.273,60 euros restantes de la subvención ya se han destinado a ayudas para la alimentación y la adquisición de medicamentos a familias en situación de vulnerabilidad, así como a la puesta en marcha de un proyecto piloto para distribuir las ayudas periódicas a las familias mediante tarjetas, que permiten elegir los productos a comprar por cada unidad familiar.
El consistorio recuerda que aparte de esta subvención insular, el presupuesto del área de Bienestar Social para 2021 recoge un aumento del 16,3 por ciento en el conjunto de líneas de ayudas directas a la ciudadanía, que suman una aportación anual de casi 1,9 millones de euros.
En total, se recogen más de 20 líneas de ayudas a familias y personas sin recursos suficientes para la cobertura de sus necesidades alimenticias y médicas, aquellas vinculadas a la discapacidad y edad, y las derivadas de situaciones de emergencia o de fuerza mayor que pueden alterar la estabilidad socioeconómica de las unidades familiares.
Asimismo, la nueva Ordenanza reguladora de las Prestaciones Económicas Municipales (PEM) del Ayuntamiento, duplica las cuantías máximas anuales destinadas a cubrir los gastos de alquiler e hipoteca para aquellas personas en riesgo de desahucio, así como las necesidades en alimentación y productos de higiene de las personas en situación de vulnerabilidad social, agrega la nota.
Todas estas medidas, “junto al incremento presupuestario para este año, la modernización de los sistemas y la incorporación de nuevo personal en el área nos permitirá ser más efectivos en la atención que reciben los vecinos, así como incrementar la cuantía y la frecuencia de determinadas coberturas sociales”, sentencia Ascanio.
En lo que respecta al problema de la vivienda, el concejal recuerda que, para atender a las personas en situación de exclusión social y residencial, han priorizado la ampliación de los recursos de emergencia, que se han visto incrementados en un 250 por ciento.
“También con la creación del primer Recurso Alojativo Municipal (RAM) público Clemencia Hardisson y la ampliación del RAMT”, abunda.
Según manifiesta Ascanio, el ayuntamiento invertirá este año más de dos millones de euros en procurar alojamiento temporal a personas en esta situación, una cuantía que sube 830.263,54 euros respecto a 2020.
Esta partida para recursos alojativos permitirá cubrir necesidades temporales de urgencia, “pero tenemos que pensar a largo plazo y buscar alternativas habitacionales para los vecinos que se encuentren en la terrible situación de perder su hogar”.
En este sentido, “y dada la histórica y ya enquistada falta de viviendas sociales y de recursos disponibles en La Laguna”, el consistorio está trabajando en un Plan de rescate de viviendas vacías para ofrecer alquileres estables y financiados por la Administración durante un año.
Un programa que incluirá todos los recursos técnicos, asistenciales, económicos y formativos “para ayudar a que estas familias y personas puedan salir de una situación tan dramática”, concluye Ascanio.